Lo dijo la propia magistrada presidente, Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, en noviembre del año pasado: “Yo espero que, a más tardar a mediados de diciembre, ya empiecen a trabajar para que a mediados de enero estén listos los climas”.
Se refería, por supuesto, a las criminales condiciones en las que trabaja el personal del Poder Judicial en el puerto de Veracruz. Ella misma lo constató.
“Para mí lo más importante que tenemos es el recurso humano y están sufriendo; ese día que yo fui a las nueve y media de la mañana era un calor insoportable. Ahora ya no lo dudo. También los abogados postulantes, los justiciables, todas las personas que concurren a un edificio donde hay juzgados civiles, familiares, donde van niños y donde van ancianos; esto es una prioridad”.
Y se acabó el año, y se cruzó la mitad del mes de enero, y las condiciones no han mejorado.
El presidente del Colegio de Abogados de Veracruz, José Alberto Priego Miranda, anunció que se plantean promover un amparo, para que sea mediante un mandamiento judicial que se mejoren las condiciones de trabajo en la Ciudad Judicial del puerto de Veracruz.
“Ya hicimos la solicitud al tribunal con la finalidad de que se realicen estas gestiones. Y paralelamente, estamos analizando las vías legales para que se pueda materializar este tema (…) Nosotros somos abogados y como tales, debemos de buscar las vías legales. Estamos estudiando la posibilidad de promover un amparo”, dijo.
Priego Miranda dijo que saben que en otros puntos de la entidad también hay deficiencias en las Ciudades Judiciales.
La titular del Poder Judicial dio una nueva fecha para que el aire acondicionado de las oficinas en el puerto de Veracruz funcione de manera normal. Dijo que “a más tardar el 25 de enero”, todo quedará arreglado.
Asegura que han tratado de solucionar el problema: “De hecho se está atendiendo, desde diciembre se está trabajando en la instalación del nuevo sistema de climas y el próximo martes o miércoles se inician las pruebas y el próximo jueves 25 se arranca con el servicio de los climas”, dijo.
La magistrada no tuvo otro argumento que el de la burocracia. Explicó que, al tratarse de recursos públicos, primero debieron cumplir con un proceso de licitación y luego esperar los tiempos para realizar los trabajos que incluyeron el movimiento de plafones.
Nada que no se supiera, nada que no debió ser considerado a finales del año pasado, cuando prometió que a mediados del mes de enero quedaría reparado el desperfecto.
La magistrada no explica qué sucedió con el sistema original de aire acondicionado que existía al momento en que se entregó la obra. Tampoco informa si se procedió legalmente contra la empresa responsable. Este nuevo sistema debió correr a cargo de la empresa que incumplió con las especificaciones y con seguridad en los contratos se debió considerar una garantía que las autoridades debieron hacer valer.
Nada de eso ha sucedido.
Lo más grave de este tema, es que sucede en un recinto donde -se supone- se imparte justicia. Oficinas convertidas en verdaderos infiernos, no hablan bien de la calidad del trabajo que ahí se lleva a cabo.
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Epílogo.
Y a propósito del Poder Judicial de Veracruz, la propia magistrada presidente Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, reconoció que se encontraron “observaciones” en la auditoría que se realizó a la gestión de Joana Marlene Bautista Flores en la Dirección de Administración. *** Aunque la magistrada aseguró que están corriendo los términos para que la exfuncionaria solvente dichas observaciones, ha trascendido que ya existen carpetas de investigación, no sólo en contra de ella, sino de algunos de los que fueron sus colaboradores y que dejaron sus cargos incluso antes que ella. *** “Ya se finalizó la auditoría interna por parte de la Contraloría. Resultaron una serie de observaciones y estamos en la etapa dónde estamos solventando”, admitió. *** Dijo que las observaciones son “de carácter administrativo” y es precisamente esa área -la Dirección de Administración- la que debe solventar. “De ahí seguimos, veremos si no se solventan, qué ocurre, pero ya es un tema que está caminando”. *** En los pasillos del Poder Judicial se habla de una “consigna” para llevar el tema hasta los tribunales.
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