¿Ha oído usted hablar de Alfonso Reyes Garcés, secretario de Seguridad Pública en Veracruz? Al parecer, Harfuch y el gobierno federal tampoco.
El 18 de marzo, a escasos meses de iniciar el gobierno de Rocío Nahle, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana federal, Omar García Harfuch, confirmó la detención en Veracruz de Francisco Javier N, alias «El Veterano», presunto integrante de la «Mara Salvatrucha» y uno de los 10 prófugos más buscados por el Buró de Investigación Federal (FBI) de Estados Unidos.
Semanas más tarde, en el mes de junio, Harfuch informó de la detención de un presunto delincuente relacionado con el homicidio de Yesenia Lara, candidata de Morena a la alcaldía de Texistepec, en Veracruz.
Ese mismo mes, en un operativo ordenado por Harfuch, fue asegurada una “mini refinería” dedicada a la producción de combustible en la zona industrial de la ciudad de Coatzacoalcos, al sur de Veracruz.
La noticia del desmantelamiento fue dada a conocer el miércoles 18 de junio a través de las redes sociales del propio secretario de Seguridad, quien explicó que lo que medios catalogaron como refinería clandestina, producía diésel artesanal, nafta ligera o solventes, y aceites tratados o combustóleo ligero.
En todos estos casos, nunca se mencionó de la intervención de la policía del estado o la fuerza civil, la supuesta policía de élite del gobierno estatal. En todo caso, hubo algunos reconocimientos a la Fiscal del Estado, lo que sin duda fue oxígeno puro para mantenerse en el cargo.
En los hechos, ante el fracaso de la estrategia de seguridad del gobierno estatal, agravada por los hechos violentos en el norte de Veracruz adjudicados a la “mafia veracruzana” o “grupo sombra”, García Harfuch y el gobierno federal han tomado el control de la seguridad en Veracruz.
El viernes pasado, ante la creciente violencia en el norte de Veracruz, el propio secretario de seguridad anunció que el gobierno federal tomará medidas específicas para desmantelar a este grupo criminal, cuya fama ya trascendió fronteras.
La estrategia federal incluye el despliegue de fuerzas de seguridad además de que la Guardia Nacional reforzará vigilancia en la carretera México-Veracruz y otras. “Ya tenemos un despliegue para continuar con las detenciones”, dijo en la conferencia matutina, sin que se mencionara al gobierno estatal.
El «Grupo Sombra» ha sido señalado como el principal responsable de diversos actos de violencia y amenazas contra políticos en Veracruz, lo que ha generado un clima de temor, entre ellos, el asesinato de la maestra Irma, el despojo de cuerpos humanos en una carretera de Poza Rica y el motín en el penal de Tuxpan, que dejó a 8 reclusos muertos.
De hecho, la respuesta del grupo criminal al anuncio de Harfuch no se hizo esperar. El mismo viernes por la noche se registró una intensa movilización en el penal de Tuxpan, luego de que fueran arrojados dos artefactos explosivos al interior del Cereso. Los artefactos no explotaron y fueron lanzados presuntamente con el uso de un dron.
Que el gobierno federal se haga cargo de la seguridad en Veracruz es una buena noticia; que las fuerzas de seguridad del estado no tengan capacidad de respuesta, no.
El montaje de Ramos Alor en Zongolica compromete a la gobernadora Nahle
Lo que sucedió el martes pasado en el hospital Rural IMSS de Zongolica no fue un caso de éxito en el abasto de medicinas, sino el fracaso y exhibición pública de un montaje orquestado por el delegado del IMSS Bienestar en Veracruz, el negligente Roberto Ramos Alor, ex secretario de salud en el estado.
¿Qué sucedió? Según los videos que circularon profusamente en redes sociales, a la gobernadora le pasaron mal las coordenadas y llegó al hospital que no era. Se suponía que tras la visita de Ramos Alor al hospital de Tlaquilpa dos días antes para abastecerlo de medicamentos, la gobernadora llegaría para recibir el agradecimiento del hospital y la gente de la región de Zongolica.
Pero alguien se apendejó y en lugar de llevarla al escenario montado previamente, la condujeron a un hospital para que recibiera un brutal golpe de realidad: los hospitales –ya sea del estado o del sistema IMSS Bienestar- no tienen medicinas, como la presidenta Sheinbaum y ella misma han asegurado.
“Vengo a supervisar, porque me reportó el doctor Ramos Alor que estuvo aquí, que trajo los medicamentos y si me habló de ciertas necesidades; pero yo quiero ver en qué porcentaje estamos en la farmacia y si nos están ayudando los Centros de Salud o de aquí se reparten, porque también en los centros de salud nos están solicitando. Medicamentos hay, ese es el tema y si los tengo que traer cada tercer día los tengo que traer», dijo Rocío Nahle, según se recoge en la crónica de Alcalorpolítico.com
Se supone que para entonces ya había pasado por ahí la camionetita de la salud. Pero resulta que ese es un tema que no puede atender dicho hospital, pues éste no tiene nada que ver con el programa nuevo de servicios en salud denominados IMSS-Bienestar.
Ante estas palabras uno de los médicos le explicó que el abasto en este hospital siempre lo han tenido a través del almacén del IMSS, pero sólo tienen entre 40 y 45 claves de 195 que deberían tener en abasto. Entonces la Gobernadora preguntó si el titular del IMSS-Bienestar, Roberto Ramos Alor había visitado el nosocomio y le dijeron que no. «¿Entonces a cuál vino, pues?”, respondió la mandataria, poniendo en evidencia el montaje del ex secretario de Cuitláhuac García.
Al día siguiente de su visita, “camionetitas de la Salud arribaron a sus instalaciones para surtir los medicamentos faltantes y garantizar la atención oportuna a la población”, informó el gobierno estatal. Pero, ¿esa camionetita habría llegado con tal oportunidad a Zongolica si no hubiera quedado al descubierto el montaje?
La gobernadora Nahle, en un intento por mostrarse diligente, terminó exhibiendo que el hospital solo tiene 40 de 195 medicamentos básicos, lo que sucede en prácticamente todos los hospitales del estado. Mientras en Palacio Nacional y en el gobierno federal insisten en que “no hay desabasto”, la realidad es que comunidades enteras siguen sin acceso a tratamientos vitales.
El otro problema es que las autoridades no entienden cómo funciona el sistema de salud en lo federal y en lo que corresponde al estado. ¿Se puede resolver una crisis que no se conoce o no se comprende?
Así, el montaje orquestado por Ramos Alor terminó por exhibir precisamente lo que quería ocultar: el desabasto de medicinas en Veracruz.
Aumenta la extorsión un 60%
En Veracruz, la extorsión creció en un 60.7 por ciento durante el primer semestre de 2025, de acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
La entidad pasó de 56 casos registrados en enero a 90 durante junio.
Mientras que en el primer mes se cometieron 1.8 delitos diarios, al cierre del semestre ocurrieron al menos tres sucesos diarios, si se considera que es uno de los delitos que menos se denuncian.
Según datos del SNSP, los municipios con los números más altos de extorsión son Xalapa, con 88 casos; Veracruz, con 53; Coatzacoalcos, con 39; Córdoba, con 20; Orizaba, con 19; Tantoyuca y Martínez de la Torre, con 11 cada uno, y Tuxpan con 14.
Sin embargo, hay otros 82 municipios que son víctima de este flagelo y acumulan denuncias que oscilan entre una y ocho. La gravedad del tema orilló a la autoridad responsable de procurar justicia a realizar modificaciones en el marco legal.
El 11 de julio en la Gaceta Oficial estatal fue publicado un decreto que modifica el reglamento a la Ley Orgánica de la Fiscalía General local para crear la Unidad Especializada en Combate al Secuestro y la Extorsión.
Ni decisiones como esa alteran al crimen organizado; el 18 de ese mes, en el mercado del municipio de Álamo, hombres armados secuestraron a la maestra jubilada y taxista Irma Hernández Cruz, quien fue torturada y obligada a grabar un video para advertir a quienes se rehúsan al pago por extorsión. El cuerpo de la mujer de 62 años fue hallado el día 24.
Tras la ejecución, Nahle anunció que reforzarían las medidas de seguridad, aunque no explicó la estrategia.
«La fiscalía Veracruz y el gobierno de Veracruz trabaja en coordinación con las instituciones de seguridad federal para salvaguardar la integridad de la población. El lamentable asesinato de la maestra Irma Hernández Cruz NO quedará impune y reforzaremos las medidas en todo el estado», escribió en su cuenta de X.
Una semana después, el gobierno federal desplegó a 300 elementos de la Guardia Nacional y 80 de la Secretaría de Marina en la región norte.
Particularmente, esa es una zona en disputa por el control del crimen entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y la Mafia Veracruzana (antes Grupo Sombra, una escisión del Cártel del Golfo) y, en menor medida, con el Cártel de Sinaloa.
Dicha agrupación local aumentó exponencialmente su influencia en Veracruz durante el sexenio de Cuitláhuac García.
Los casos de extorsión, sumados a los homicidios y robo a negocio que ocurren a diario en el país, significa un entorno de riesgo permanente para quienes generan empleos, de acuerdo con Juan José Sierra Álvarez, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
«La extorsión se mantiene como el delito de mayor crecimiento: 5 mil 887 víctimas en seis meses, el mayor número en la historia. En promedio, se denuncian más de 32 extorsiones cada día, aunque sabemos que la cifra negra alcanza el 96.7 por ciento de los casos que no se denuncian.
«El silencio sigue predominando, lo que no significa que no ocurran», lamentó al presentar el Monitor de Seguridad el pasado mes de julio.
Marcela Figueroa, secretaria ejecutiva del SNSP, coincidió al respecto en la conferencia del 12 de agosto, al dar a conocer que, entre los delitos de alto impacto, la extorsión es el único que no registra una disminución al comparar los primeros siete meses de 2019 con el mismo periodo de este año.
«En el caso de la extorsión, si bien se observa que hubo un incremento en esta comparación (de 24.48, en 2019 a 30.45, en 2025; un alza del 25.4 por ciento), esto también se debe a que se está incentivando la denuncia después de la puesta en marcha de la estrategia nacional antiextorsión», explicó.
En la última medición nacional (2022) de la Coparmex, dio a conocer que en Veracruz el 54.8 por ciento de sus asociados reveló haber sido víctima de algún delito.
REFLEXIÓN
El compañero columnista Filiberto Vargas Rodríguez hace la siguiente petición, que todos respaldamos: “Ya va siendo hora de que el titular de seguridad Pública dé la cara, no para que hable de sus estrategias contra la delincuencia, sino de las medidas que ha adoptado a partir de que han quedado en evidencia los actos de corrupción (complicidad) de elementos de esa corporación con la delincuencia organizada. ¿Será que no los ve, ni los oye?”. Escríbanos a mrossete@yahoo.commx | formatosiete@gmail.com |
