Claudia Sheinbaum destacó la postura de su gobierno frente a Estados Unidos y reiteró que nadie vulnerará la soberanía de México. Un tema en el que, sin duda, ha sido firme, enfrentando con una política sólida las diferencias y presiones diplomáticas del vecino del norte. La fuerza y el músculo político que mostró Morena en Veracruz dejan una clara lectura: el partido en el poder está sólido en el estado.
Pese a quienes han apostado por debilitar a Rocío Nahle, la gobernadora salió fortalecida. El abrazo de la presidenta a la mandataria veracruzana y el anuncio de nuevas acciones en beneficio de la población le significan un respiro, luego de los sinsabores mediáticos por la inseguridad.
En otro frente, el tema de la seguridad en Tamaulipas también generó polémica. Resulta paradójico que el actual gobernador, Américo Villarreal, acuse al exmandatario Francisco García Cabeza de Vaca de presuntos vínculos con el tráfico de combustible, cuando él mismo fue exhibido en fotografías junto a Sergio Carmona, conocido como “el rey del huachicol” en esa entidad. Una figura que todos los tamaulipecos recuerdan por su cercanía con la clase política.
Se ha anunciado que existen más de 200 órdenes de aprehensión contra políticos, funcionarios y empresarios ligados al huachicol, lo que ya ha provocado la huida de varios hacia Estados Unidos, “por si las dudas”. Este operativo representa un golpe contundente del gobierno de Claudia Sheinbaum contra el tráfico de combustible.
La exigencia ciudadana es clara: que no haya excepciones. Si existen políticos de Morena involucrados, también deben ser procesados. En Tamaulipas —un estado que por años ha sido testigo de la complicidad de políticos de todos los partidos con el huachicol— la justicia no puede tener colores. |