Las acciones políticas de los extraditados del PRD, fueron autorizadas por los altos mandos de Acción Nacional, con lo cual queda demostrado que todos están en la misma condición política y por lo consiguiente tienen el mismo derecho de hacer política en favor de la candidatura.
No es que Rafael Fararoni Mortera, tenga en las manos la postulación; pero da la casualidad de que el primer panista de Veracruz Miguel Ángel Yunes Linares, definirá las candidaturas de las cabeceras distritales, hasta el último momento para asegurarse, que llegue el mejor candidato y que ningún activo se cuele en otro instituto político todos se quedaran en la canasta azul, amarilla.
Se dice que uno de los métodos que se basara para el arribo del próximo candidato de la alianza PAN-PRD, serán encuestas y más encuestas y ahí se comprobara quienes son populares honestos, y cuáles son los populares deshonestos e indecorosos.
Los primeros sondeos serán totalmente abiertos, los penúltimos serán internos y los últimos se desarrollaran entre los líderes de opinión y sectores productivos el cual será un pretexto para lanzar el dedazo y elegir al candidato que tenga las características del clan Yunista en el sentido de no caer en personajes que representen más de lo mismo, los cuales en sus respectivos municipios le hicieron daño a los Veracruzanos en épocas pasadas y ante este panorama entre la burbuja Yunista, se dice que habrá sorpresas y llegaran los mejores hombres y mujeres que estén plenamente identificados con sus coterráneos, no personajes que están siendo recomendados, por altos jerarcas del Panismo y Perredismo.
En fin veremos qué pasa con los candidatos de la nueva alianza, porque no vaya a ser que estábamos mejor antes y no ahora con la llegada del Yunismo venga algo peor.
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