No hay peor enemigo del hombre, que el mismo y más cuando están sentados en el poder. La situación que viven los familiares de desaparecidos es realmente caótica. La incertidumbre de levantarse día a día con la esperanza de encontrar aunque sea a su hijo muerto, entristece. Muchas historias [miles a decir verdad] se desprenden de cada uno de los colectivos -12 en total- existentes en el estado. Hombres y mujeres, que diariamente buscan a sus familiares pese al dolor que esto les representa. El sufrimiento, les da la fortaleza para seguir adelante, hasta excavar con sus propias manos la tierra en donde les alertaron existen cuerpos enterrados.
Sara, no sabe de dónde agarra fuerzas para subsistir: “Mi hijo desapareció en el 2014 (…) Lo secuestraron cuando tomaba su camión rumbo a casa, había salido apenas de la universidad y tenía menos de tres meses trabajando para una empresa (…) Era contador, bueno pasante, apenas estaba tramitando su título pues salió con mención honorífica (…) Desde ese día no vivo, desde ese día, algo murió dentro de mi (…) Sufro de pensar las penurias que podría estar pasando mi criatura, lloró de pensar que éste muerto (…) No sé en qué condiciones lo voy a encontrar, pero quiero encontrarlo (…) Cuando veo los muertos en las fosas, me desvanezco en mi interior, tengo sentimientos encontrados, porque por un lado quisiera que mi hijo no estuviera ahí, pero luego, le pido a Dios que me dé la oportunidad de encontrarlo aunque sea muerto para poder enterrarlo como él se merece”.
En una entrevista con Araceli Salcedo Jiménez –madre de Fernanda Rubí Salcedo Jiménez, desaparecida el 07 de septiembre del 2012- que una servidora le realizó hace un año -07 de marzo del 2016-, pude palpar como mi corazón se comprimía ante el dolor y el llanto inevitable de esa mujer, que al describir la impotencia que le implicaba al no poder encontrar a su hija, terminaba su día en la recámara de su pequeña, abrazando los recuerdos que el lugar le otorgaban. “Todos los días, antes de dormir, le hablo a mi hija (…) Le digo, hoy chiquita no pude encontrarte, pero mañana seguiré buscándote mi amor, verás que pronto estaremos juntas”.
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Dos historias de miles que existen entre los integrantes que conforman los 12 colectivos en Veracruz. Mujeres y hombres que no cesan de buscar, que lloran, que no les importa estar bajo fuertes rayos del sol, bajo la lluvia, para poder encontrar a sus hijos. Por ello no se comprende la insensibilidad de quienes ocupan puestos en el poder. Seguramente, es porque jamás han sentido el dolor que produce el perder a un ser querido, a un hijo, y quedar en el limbo. Tal vez jamás han conocido la sensación de estar suspendido en la nada, en un estado en donde también se preferiría estar muerto y no deambular por el mundo con la pena y el sufrimiento que les produce la pérdida.
Reclaman trato digno, reclaman que se pongan a trabajar: ¿Es mucho pedir? El día de ayer por la noche, la Fiscalía General de la República (FGE) a través de su titular, Jorge Winckler Ortiz, el gobernador del estado de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares y el subsecretario de Derechos Humanos de la SEGOB, Roberto Campa Cifrian se reunieron con los colectivos. Ahí nuevamente se volvió a evidenciar la poca relación y la falta de congruencia de parte del fiscal con relación al tratamiento que se espera brinde a los padres de desaparecidos. No perdieron objetos, son vidas humanas las que están en juego y la desesperación es comprensible en por parte de los familiares. Ponerse en los zapatos de las familias, sería un acto humanitario de su parte.
Quienes estuvieron en dicha reunión con los integrantes de los 12 colectivos fue el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Roberto Campa Cifrian; el gobernador del estado, Miguel Ángel Yunes Linares; el fiscal General del Estado (FGE), Jorge Winckler Ortiz; subprocuradora de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Sara Irene Herrerías; funcionarios de la Policía Federal (PF); Jaime Rochín de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV); el Sistema Nacional de Seguridad Pública. Para tratar el tema de las fosas clandestinas que están siendo reportadas en el estado de Veracruz y las identificación de los restos.
Los acuerdos realizados es establecer la próxima reunión que se llevará a cabo el próximo 29 de marzo del año en curso con los 12 colectivos nuevamente. Se trataron las deficiencias que reportaron los familiares de desaparecidos y también, se replanteó la garantía del trabajo de las autoridades con relación a los restos encontrados en Colina de Santa Fe [250 cráneos] y 47 cráneos en Arbolillo municipio de Alvarado y establecieron la próxima reunión –que será a finales de marzo-. Se propuso establecer un calendario para que sean identificados todos esos restos a través del Registro Nacional de Víctimas (RENAVI) que será controlada por la División Científica de la Policía Federal, para las tomas biológicas de los restos humanos encontrados en las fosas clandestinas y comparadas con los datos de ADN que proporcionen los integrantes de los colectivos y de todas aquellas personas que tengan un familiar desaparecido.
Campa Cifrian, aportó que el trabajo que anterior fiscal General del Estado, Luis Ángel Bravo Contreras se hizo inadecuadamente y por lo tanto, no existe una base de datos de registros genéticos para cotejarlo con los restos que se han localizado en las fosas clandestinas localizadas en Colinas de Santa Fe y Arbolillo. Es decir, el ex fiscal, fue negligente en los protocolos que se deben de cumplir por parte de la autoridad y por lo tanto, también esperaremos que Winckler Ortiz proceda legalmente en su contra por las irregularidades que ejecutó en contra de la sociedad veracruzana y que evidencia, la corrupción en la que operó la FGE en la administración del hoy prófugo de la justicia, Javier Duarte de Ochoa.
Para el día de hoy se presupone que nuevamente el gobernador del estado, Miguel Ángel Yunes Estatales y el fiscal General del Estado, Jorge Wickler Ortíz sostendrán una reunión con los Colectivos de Personas Desaparecidas en el estado, el padre José Alejandro Solalinde Guerra y Las Patronas, quien afirmó en entrevista en la facultad de Humanidades de la Universidad Veracruzana [dónde participaría en el II Foro de Ética y Derechos Humanos] que las fosas clandestinas localizadas en Colinas de Santa Fe y Arbolillo no “son nada” comparadas a las que deben de existir en municipios como Tierra Blanca, Acayucan, Coatzacoalcos, Orizaba y Córdoba y además, aportó que existen dos cuevas en el estado de Veracruz donde hay más cuerpos de personas desaparecidas ejecutadas por los grupos delictivos “Los Zetas” e integrantes de Cartel del Golfo.
“En una reunión en la Provincia Eclesiástica de Veracruz, el obispo Eduardo de Córdoba dijo que existían dos cuevas en el estado de Veracruz (…) Él tiene información, debería de darla (…) La información que se tiene “no es nada” en comparación con lo que viene (…) Tienen que ver a Coatzacoalcos, porque ahí era el centro Zeta, también de Fidel Herrera Beltrán porque fue denunciado ante gobernación y eso lo tengo, en audio (…) Puedo decir hasta el nombre de quien fue el funcionario de Gobernación y como ese informe que se grabó y que le costó la vida y lo entregué yo a la Comisión Nacional de Derechos Humanos el 15 de junio del 2009 y ese mismo día lo entregué también al Cisen, de modo que no pueden decir que no se enteraron y también aquí con ustedes, con los periodistas de Veracruz yo entregué algunos ejemplares del audio (…) Yo cumplí con decir pero no hicieron caso, no me creyeron y ahora, ya son palabras mayores lo que estamos viendo”.
El padre Solalinde Guerra, también habló con relación al papel que ha desempeñado el titular de la FGE, Jorge Winckler Ortiz, a quien tildó en una palabra de inhumano, insensible, por no comprender la situación que padecen los familiares de los desaparecidos en Veracruz.
“Esta tarde se llevará a cabo una reunión con un servidor y Las Patronas, que acompañaremos a las víctimas no sustituyéndolas y estamos dispuestos a generar toda la estructura necesaria para que se esclarezca esto (…) Si el gobernador me quisiera recibir a mí o con Las Patronas no lo aceptaríamos (…) Es temprano para hacerle reclamos pero si advertencias porque si él no cumple con lo que tiene hacer, él entraría en la terna (…) Empezando por su fiscal que puso, Jorge Winckler que ha sido rechazado porque no tiene la sensibilidad, no tiene el perfil, es una persona como tantos otros, son políticos, de ‘amiguismo’ que los ponen sin tener el perfil, sin saber nada y lo más triste, sin sentir siquiera un poco o aproximado, lo que sienten la víctimas (…) Si el gobernador Yunes quiere seguir con él, él tendrá las consecuencias”.
Indicó que los municipios en donde se reportan fosas clandestinas son Coatzacoalcos, Tierra Blanca, Córdoba, Orizaba, Acayucan, Medias Aguas “Nosotros tenemos toda la información pero no podemos darla así nada más, necesitamos que eso se sistematice, que se organice y entonces, juntaremos todas las evidencias que tenemos”.
Alejandro Solalinde Guerra, se ha dedicado a recorrer el país en apoyo a familiares de inmigrantes que han sido desaparecidos en México. Junto con grupo que integran Las Patronas, mujeres que se han dedicado a trabajar en pro de los indocumentados en su natal Tierra Blanca, han realizado una importante aportación y presencia a nivel nacional. Al padre Solalinde no le interesa si es merecedor del Premio Nobel de La Paz, su preocupación es pro de las personas vulnerables a la delincuencia organizada que domina la nación y el estado de Veracruz.
En su marcha, han podido detectar el modus operandi que se descubre en la desaparición de personas, indicó que no se le puede adjudicar a un solo Cartel “Si bien es cierto que Los Zetas, que es lo peor que ha tenido México dominaban solamente 20 estados (…) Si impusieron la ‘técnica’ de la desaparición de tambos de 200 litros, pero ellos no pudieron haberlo hecho solos (…) Ellos siempre estuvieron ligados a funcionarios públicos, a servidores públicos (…) De modo que conocemos la parte del crimen organizado, pero nos falta conocer la parte del crimen autorizado (…) Es un modus operandi parecido (…) Es un panorama Dantesco de verdad que tenemos, yo no sé ustedes, pero yo estremezco en verdad de ver, como en todos lados aparecen estas fosas, fruto de unas gestiones, de los panistas de Calderón y también de Peña Nieto”.
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