Determinar a dónde fueron a parar los 10 mil millones de pesos que le autorizó la LXI Legislatura al ex mandatario quesque para el rescate de 150 mil damnificados por las lluvias en 2010.
Insólito que sorpresivamente se autorizara tamaña deuda a escasas ocho semanas de que concluyera el mandato del hoy desaparecido ex gobernador, aunque hay indicios de que está en Canadá.
Para el sucesor Javier Duarte lo de ese billullo no era su problema.
En ningún momento sería motivo de interés explicar y menos justificar el destino de esos dineros al estar empeñado por hacer brillar su nuevo proyecto de gobierno en donde no estaban incluidos los afectados por los aguaceros que por cierto cada año son iguales de intensos y afectan a numerosas poblaciones veracruzanas.
Y eso lo sabían los diputados al momento de aprobar el préstamo.
Sabían que el Fonden Federal (Fondo de Desastres Naturales) ya se había comprometido entregar 3 mil 500 millones de pesos para esa contingencia.
Sabían que Fidel tenía un techo de ejercicio presupuestal de más de 70 mil millones de pesos para 2010 y sabían cómo se las gastaba Fidel quien comprometió en el 2009 a los 212 municipios con 6 mil 500 millones de pesos vía “bursatilización” los siguientes 20 años.
Aun así, los diputados votaron en favor del empréstito.
Sin rubor levantaron el índice en ese entonces los diputados Héctor Yunes Landa y Erick Lagos Hernández, que fue el que tejió toda la urdimbre por instrucciones de Fidel, siendo el primero líder de la bancada priista, que además fue quien instrumentó la sesión del Congreso como presidente del mismo de acuerdo con el segundo –Erick Lagos-, quien era el Presidente de la Comisión de Hacienda y la diputada Acela Servín, Secretaria del Congreso.
Más en la lista.
La octogenaria Acela Servín, Secretaria de la Mesa Directiva del Congreso, la diputada Jazmín García Guzmán (¿el apellido le dice algo?), el diputado panista Pepe Mancha, quien hoy se la pasa echando pestes contra Fidel y Javier y el diputado Manuel Rosendo Pelayo hoy alcalde de San Andrés Tuxtla, que cada año, en su cumple, derrocha alcohol y comida para ocho mil invitados.
A ellos y 35 diputados locales más su par, el diputado de Convergencia, Sergio Vaca, quien votó en contra, desde la tribuna les gritó que si no era suficiente que el saliente hubiera gastado en su mandato 334 mil 835 millones de pesos y que el peor huracán que había devastado Veracruz se llamaba Fidel Herrera Beltrán.
El diputado Sergio Vaca revela asimismo, que días atrás le ofrecieron “jugosas sumas” por no asistir a la sesión de ese día mismas que fueron “in crescendo por asistir y votar a favor”.
Pero como si no hubiera hablado.
Fueron tres horas de abrumadoras posturas de defensa de Fidel y su humanitaria determinación “que costaba 70 mil millones de pesos, pero con 10 mil millones algo se haría”.
Entre las ardientes posturas en favor destaca la del hoy dirigente del PAN, Pepe Mancha quien llamó a solidarizarse con los damnificados porque “Veracruz somos todos” (aplausos).
Hubo otros, sin embargo de su partido que negaron su voto al empréstito, fueron Víctor Alejandro Cuevas y Federico Salomón Molina del PAN, sin olvidar al digno José Sergio Rodolfo de Convergencia.
No así, Alfredo Tres, Elvia Ruiz Cesáreo, Dalos Ulises Rodríguez Vargas y Manuel Laborde, todos inscritos en una de las más oscuras páginas de la historia del más grande saqueo que ha sufrido Veracruz en su historia, al entregar su voto a ciegas.
Se carece de información precisa de cuando se transfirieron los 10 mil millones de pesos a Fidel Herrera, aunque la normatividad de algunas instituciones bancarias como “Interacciones”, de la familia Hank González y Hank Rhon, preferidas de Fidel y Javier, refiere que en un plazo no menor de 28 días se ejecutan las transferencia correspondientes.
Es decir a solo días de la trasmisión del poder ya había dinero fresco para los damnificados, aunque no hay precisión de él o los damnificados. Una fotografía sigue recordando a Fidel descalzo llevando despensas al infelizaje.
Fueron 10 mil millones de pesos contantes y sonantes autorizados por la LXI Legislatura que voto en favor del endeudamiento, que por cierto superaría con creces el alumno Javier Duarte.
Otros diputados levantadedos:
José Luis Almantza Kats (PRI), Pedro Angel Andrade López (PRI), Martín Becerra (PRI), Julio Chávez Hernández (PT), Margarita Guillaumín (PRD), José Juárez Ambrosio (PRI), Magdalena Lucas (PAN), Fabiola Martínez (PAN), Celina Medina Sagahon (PAN), Jorge Morales Trinidad (PRI), Calos Nolasco (PRI), Marco Antonio Núñez (PAN), Ángela María Perera (PRI), Rubén Pérez Vera (PAN), Celestino Rivera (PRD), Tomás Rubio (PRI), José Ricardo Ruiz Carmona (PRI), María de los Ángeles Sahagún (PAN), Rafael Sánchez (PAN), María Bernardina Tequiliquiua (PRI), Hugo Alberto Vázquez Zarate (PRI), Gloria Vázquez Hernández (PAN), Lorenzo Velázquez y Cecilio Viveros (PRI).
Medalla al deshonor para estos distinguidos diputados que dejaron a Veracruz embarcado, por primera vez en su historia, con una deuda de 10 mil millones de pesos.
Tiempo al tiempo.
El autor es Premio Nacional de Periodismo |