Aquí en los Tuxtlas, uno de los mayores problemas que está enfrentando, el gobierno de Catemaco, es la mala opinión que tienen los ciudadanos de su Administración Municipal, entre quienes existe el rumor de que su alcalde Jorge Alberto González Azamar, se enriqueció de manera rápida ante la complacencia del ORFIS que no lo obligó a cumplir con las normas técnicas y financieras en las distintas obras materiales que desarrollo su gobierno municipal, durante estos cuatro años de su mandato.
Los valientes Catemaqueños han denunciado la deficiente construcción del malecón del lago de Catemaco, obra que en menos de un año presenta deficiencias, la otra es el acondicionamiento del centro de salud, obra material que tendrá un costo inflado superior a los dos millones de pesos, cuando su costo real es menor.
Cuando el munícipe Catemaqueño, llego a la alcaldía se envolvió en la bandera de la honestidad, su padre putativo, Jorge Uscanga Escobar, nunca pensó que el más aventajado de sus alumnos, lo superaría en las intrigas políticas
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A unos meses de concluir su mandato el Edil Catemaqueño, claramente se está mostrando como un mal alcalde, la desnudada que le están poniendo sus paisanos, por los presuntos malos manejos en sus faraónicas obras, es pan diario entre los diferentes sectores de la sociedad Catemaqueña.
Nadie le ha preguntado a González Azamar como de la noche a la mañana, es uno de los poderosos de Don Dinero en los Tuxtlas, inclusive tiene lana o igual o más de quien dice es su protector, El Senador José Yunes Zorrilla.
Mareado por la borrachera del futuro triunfo del PRI, señala a sus amigos que va ser candidato plurinominal del Panal, sin pesar que Don Jorge en estos momentos es un producto electoral indefendible, debido a que la sociedad, ya no quiere más de lo mismo.
Los Catemaqueños opinan que todo el mundo tiene el derecho a progresar, porque un alcalde como el dedicado a defender las causas populares, no necesita de una casa millonaria como las que tiene en la comunidad de Ojo chapan, Catemaco , San Andrés Tuxtla y Xalapa, cuando en Catemaco, existen un sinfín de familias que no tienen ni petate, para dormir, por lo que bien le haría a Jorge Alberto González Azamar, explicar el origen de su espontanea fortuna, porque lo único que se ha dedicado es a vivir del presupuesto como Presidente Municipal de su natal Catemaco.
Mas que un atractivo político, “cachetón Azamar” es un lastre para el partido que lo llevo al poder, en donde por supuesto se ríen de el, por su devaluación política, ya no es el mismo que en época atrasadas, es mas ya no le sirve al mismísimo Panal, ni mucho menos al PRI-Verde, partidos que era su opción en futuras batallas electorales, porque ahora en lugar de sumar, les resta.
Es más la pasividad e inmovilidad política de Jorge Alberto González Azamar llego a los extremos, porque luego de la gestión que realizo el Diputado Gonzalo Guisar Valladares, ante la federación y gobierno del estado, para que se lograra la reconstrucción el puente del Rio Coxcoapan , del municipio de Catemaco, ahora anda diciendo que esta obra fue gracias a su trabajo, cuando todo mundo sabe que tuvo que llegar Guisar Vallares a esta población, para que esta importante vía de comunicación se volviera a construir.
Volviendo al tema monetario diremos que Jorge Alberto González Azamar, no es único alcalde que se está empachando de lana, porque allá en la región de los Llanos del Sotavento, en ciudad Isla, en la Tesorería Municipal, hay mucha corrupción y seguido se hacen arqueos de los recursos que maneja esta oficina del ayuntamiento de aquel lugar, pero no para sancionar al Tesorero ,sino para encubrir los abusos y desvíos del alcalde, José María “Ratón” Aguirre, quién no ha cumplido nada, pero eso si, ya estrenó casa y rancho.
La última palabra la tiene el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quien se encuentra entretenido en su polidipsia de venganza, dejando a un lado las fechorías de los malos alcaldes que se están despachando con todo y nos vemos en la otra.
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