No salió barata la incorporación de (Pe)Dante Delgado a la alianza Por México al Frente, donde por cierto ha sido el viejo padrino que todo lo sabe y que a todos regaña. Al menos Ricardo Anaya, precandidato a la Presidencia por el PAN, el PRD y Movimiento Ciudadano, ha debido pagar alguno que otro plato roto con tal de lograr el apoyo de un partido, el del “movimiento naranja”, que debe tener su fuerza en el occidente del país, en particular en Jalisco, donde ya canta su triunfo por la gubernatura con el exalcalde tapatío Enrique Alfaro, pero que en casi todas las demás entidades tiene votaciones marginales, incluso en Veracruz donde nació.

Solo para sazonar un poco esta parte, baste recordar que en el estado donde el fundador de Movimiento Ciudadano fue gobernador sustituto, se le encarceló, y gestó posteriormente la estructura de un proyecto político personal, tendríamos que decir que en 2016, en las elecciones para Gobernador, obtuvo apenas 37 mil votos, siendo superado incluso por el Partido Nueva Alianza (51 mil 593 sufragios) y por el Partido del Trabajo (más de 49 mil 500), partido que se mantuvo al lado del tabasqueño rumbo a los comicios de 2018. De no ser por el Partido Encuentro Social, PES, que solo obtuvo unos 33 mil votos, habría quedado en el último lugar. Es cierto que en 2017, en los comicios municipales, Movimiento Ciudadano se convirtió en la cuarta fuerza electoral, con más de 230 mil votos, para lograr 10 alcaldías, pero lo que se viene este año tendrá que ubicarlo en su exacta dimensión.

Hasta las oficinas de MC en Xalapa irá el próximo martes Miguel Ángel Yunes Márquez, el júnior que anda arrastrando la cobija en su precampaña rumbo a la silla que dejará su padre a finales de año, y que ha debido recibir el apoyo de todo el gobierno estatal, en particular de los programas sociales y de infraestructura, para lograr levantar un poco sus posibilidades frente a Pepe Yunes y Cuitláhuac García. Acudirá a la casa de  quien fuera la víctima de su padre cuando este era secretario de Gobierno de Patricio Chirinos. 

Hay quienes afirman que en el acto no estará Dante, para no mostrar con mayor fervor su pragmatismo político o, mejor dicho, sus olímpicas virtudes a la hora de comer sapos, sin embargo, su presencia y todo el apoyo de su partido al primogénito de su antiguo enemigo serán necesarias para lograr el apoyo recíproco del aparato de estado para que sus propuestas a diputaciones locales y federales tengan mayores posibilidades de éxito.

Y no es cosa menor. El Partido Acción Nacional (PAN) le ofreció a Dante Delgado entregarle, como parte de los acuerdos derivados de la coalición, 45 postulaciones de candidatos a diputaciones federales. Aunque son menos que las que dispondrá el PAN (150 diputaciones) y el PRD (105), el resultado es extraordinario si consideramos que el actual grupo parlamentario está formado por 20 legisladores de sus siglas. Ya sabremos en días a quiénes, además del hijo de Luis Donaldo Colosio, pondrá Dante a jugar a la matatena política.

Ya sabemos que ha logrado doblegar a los Yunes, padre e hijo, con la imposición del empresario periodístico Eduardo Sánchez Macías, conocido por ser primo de la exesposa de Javier Duarte, Karime Macías Tubilla,  y contra quien se había lanzado el gobernador Yunes por haber recibido convenios de publicidad por más de 260 millones de pesos. En su reciente visita a Martínez de la Torre, Miguel Ángel Yunes Márquez le levantó la mano y respaldó políticamente a este personaje, quien pocas horas antes le había ofrecido una entrevista exclusiva para todos sus medios impresos y sus redes sociales.

Las repercusiones de la alianza se sentirán en breve con mayor fuerza en Veracruz.  

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