SE SABE, claro que se sabe, que los morenistas están ansiosos porque llegue, de una buena vez, el primero de diciembre de este año, fecha en la que, tanto Andrés Manuel López Obrador, en el ámbito federal, como Cuitláhuac García Jiménez, en la entidad veracruzana, rendirán protesta de sus respectivos cargos. Uno en la Presidencia de la República, y el último, en la gubernatura del Estado.
¿Y saben porqué se presume que hay prisa por llegar a los gobiernos federal y estatal?, pues simplemente, porque de esa manera, tendrán el poder constitucional que los avale para ponerse a revisar cuidadosamente todos los expedientes que ya se vienen formulando en torno a las administraciones que en este momento están por culminar.
Hay casos dentro del Estado de Veracruz, donde el mismo Presidente de la República, para esas fechas, determinará lo que se deba hacer respecto de los actores políticos que se encuentran en este momento administrando los recursos económicos de la entidad, pues se sabe que hay de por medio escandalosos errores que pueden ser suficientes para que los veracruzanos, vuelvan a vivir las etapas pasadas, cuando Duarte, tuvo que salir, antes de terminar su gobierno, con rumbo desconocido, al principio, para evitar que la justicia le llegara a los aparejos.
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Aún así, el Ex gobernador del Estado, fue localizado y aprehendido por el gobierno federal, no estatal, como se ha dicho, para que respondiera por todos los delitos cometidos en contra del erario estatal y federal.
Hoy, la historia esta por repetirse.
Lo que sucedió ayer en el Congreso del Estado, fue como aderezar una situación que se ha venido calificando de muy delicada para quien todavía gobierna en el Estado, con un poder que hizo, sin mayores comentarios, imponer a un personaje como encargado del combate a la corrupción. Sin conocer a fondo el reglamento interior del Congreso del Estado, se sabe que para que el Fiscal anticorrupción fuera aprobado, se requería de las dos terceras partes de los votos del total de diputados, cuestión que, como se dijo constantemente, no se daba en virtud de que ninguno de los propuestos alcanzaba esta posibilidad.
Aún así, el Fiscal fue impuesto a través de la toma de protesta correspondiente, en un hecho inédito e inaudito por parte de los legisladores que integran el Congreso local.
Esa es, en breve, la historia de un día legislativo en el Congreso local, donde se había advertido que se dieron presiones de todo tipo para que fuera votado y aprobado el fiscal propuesto junto con otras dos personas afines al gobierno panista en el Estado.
La intentona se dio dos veces y fracasó. Sin embargo, el Presidente de la Junta de Coordinación Política, Sergio el Bailador, como se le conoce, pues nunca se había escuchado en el Estado de Veracruz, con otro nombre, se paseaba en el recinto legislativo con toda la confianza del mundo, seguro de que al final llevarían a cabo su show y salirse, propiamente, con la suya.
Así se desarrolló un día de sesión plenaria en el Congreso local, donde todo estaba preparado para no dejar este pendiente que tendría a su cargo la próxima legislatura, porque bien se sabe de antemano, que los morenistas pondrían un Fiscal, también, de su gente, en virtud de que podrán tener la mayoría en las decisiones legislativas.
El consenso nunca ha tenido lugar en estos días, por lo que, en ningún momento hubo la posibilidad de acuerdo en donde las partes en conflicto político, pudieran resolver este asunto, que sin duda, es de bastante delicadeza, porque se trata de un personaje que tendrá la responsabilidad de combatir la corrupción, así como la impunidad, cuestión que en nada favorecerá a los veracruzanos en general, que seguirán, por estos meses, en las mismas condiciones que antes de que entrara este gobierno.
¿Y que pasará en estos apretados cuatro meses que faltan para que culmine la administración yunista?
Se verá o no, si Andrés Manuel López Obrador, se decide por perdonar, incluso a los que le ofendieron de manera personal y no política, o simplemente dará las instrucciones necesarias para que se castigue a quien lo merezca con base en las faltas y delitos cometidos.
Hoy, por hoy, la misma historia en Veracruz.
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¿SABEN QUIENES podrían estar ganando con estos escándalos en el Estado de Veracruz, tanto por la administración estatal, como por los hechos que dieron en el Congreso local?
Pues sí, son precisamente aquellos legisladores federales que ya están haciendo maletas en el Congreso federal, para dejar limpias sus curules, y que estaban en la mira de quien gobierna en la entidad veracruzana, tanto que se dijo con antelación que estaban siendo vigilados permanentemente para que no pudieran escapar el último día de sus respectivas funciones, por haber cometido también, escandalosos robos en la administración pasada del Ex gobernador Javier Duarte.
Con estos hechos que se están generando en la entidad veracruzana, a unos cuantos meses de que culmine esta administración, es posible que la persecución su en contra se haya olvidado y que hasta la vigilancia que tenían haya desaparecido, con lo que quedaran impunes sus delitos.
No son todos, desde luego y se aclara, pero sí se conocen a varios de los legisladores federales que serían aprehendidos en el último día de funciones en el congreso federal, en virtud de que ya no tendrían el fuero constitucional que los ampara, pues se sabe también que aunque el fuero haya desaparecido, para los actuales funcionarios federales y legisladores, existe todavía esta protección constitucional, de tal manera, que estarían expuestos a que fueran detenidos por los delitos cometidos y por los cuales ya se dictaron las ordenes de aprehensión correspondientes.
Aunque no del todo, aquellos legisladores que lograron una diputación federal, antes de que terminara el gobierno duartista, para poder protegerse con el fuero constitucional, están haciendo changuitos para que esta situación política siga siendo el tema de todos, con lo que se iría olvidando el asunto que los tiene preocupados.
No están del todo seguros, pero las nuevas condiciones políticas en Veracruz, y en México, les cayeron como anillo al dedo, tanto que también operaron en contra del PRI y del PAN, para favorecer a Morena. Esto es un hecho.
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DICE EL ECONOMISTA Rafael Arias Hernández, de que ya es tiempo de que el Gobernador del Estado, instruya a todos sus colaboradores en todas las áreas de la administración para que se dediquen a buscar la manera de transparentar los millones de pesos que se manejaron en esta administración estatal, pues hasta ahora, dice desconocer, como también el pueblo veracruzano, cuál fue el costo de muchas obras materiales, entre ellas, por ejemplo, la reparación de la carretera que va a Coatepec.
Y es que Arias Hernández, es un conocido politólogo y economista de profesión que siempre ha estado analizando con detenimiento todo el acontecer político y administrativo de las más recientes administraciones federales, pues con pruebas de su dicho, ha criticado severamente a quienes son los protagonistas de la vida política del país y del Estado, en lo particular.
Rafael Arias Hernández, no es un improvisado, porque tiempo ha tenido para prepararse adecuadamente conociendo a los actores políticos directamente, a cada uno en su tiempo, de tal manera, que sus versiones analíticas de la economía mundial, nacional y estatal, se las sabe de todas, todas, por lo que al advertir de los errores en política y en administración, le ha valido especial reconocimiento, pero al mismo tiempo la incomprensión de quienes han sentido en carne propia su directa y dura crítica.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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