José Manuel Pozos Castro en la presidencia de la Mesa Directiva de la LXV Legislatura local pudiera ser lo mejor que ocurrió ayer en el Congreso local. Y no es por demeritar en ninguna circunstancia al resto de los diputados locales que conforman la alianza Juntos Haremos Historia (Morena en su mayoría con 19 curules), pero la trayectoria y experiencia política de Pozos Castro sólo tiene competencia en la figura de Amado Cruz Malpica, moreno de Cepa, quien al parecer cayó de la gracia de la bancada… hasta el momento. Recuerden que falta definir la Junta de Coordinación Política en la que muchos esperan que para el sureño haya “perdón y olvido” para los “pecados legislativos” que le achaquen.

Lo cierto es que, en apariencia, el partido mayoritario en el Congreso no tiene presencia en la Mesa Directiva… en apariencia.

Pozos Castro es un encantador de serpientes, por decirlo metafóricamente… hábil en la cuestión política, conciliador y abierto al diálogo, ha de llevar la batuta a buen ritmo en un Congreso donde el PAN sabe y entiende lo que es ser oposición.

Quienes lo conocen, dicen que dejó gratamente impresionado al cabeza de manada de Morena con el triunfo que obtuvo en Tuxpan… de ahí su designación.

Eso sí, como en todas las bancadas, como en pasadas legislaturas, se tiene en claro que los diputados han de acatar la línea que les dicte quien ha de ser el puente entre López Obrador y el estado… ¿o por qué creen los morenos optaron por un petista y no por alguien emanado de Morena?

Lo que hay que reconocer es que quien haya decidido la Mesa Directiva, fue un perverso, un maquiavelo, porque se dejó en manos de los grupos minoritarios la presidencia, vicepresidencia y secretaría. Pozos Castro, del PT, con cinco diputados; Alexis Sánchez García, de Movimiento Ciudadano, con dos diputados; y Jorge Moreno Salinas, del PRI, con tres. Los flancos de Pozos Castro, por la vía plurinominal. Así que no debería de extrañarnos que en la renovación de la Mesa Directiva llegue hasta Andrea Yunes (única del PVEM) u otro del PT, PRI o Movimiento Ciudadano, pues a como van las cosas, se trata de cerrarle el espacio a la oposición más dura que pueda tener Morena en Veracruz: el PAN.

En lo que respecta a la Jucopo, aun cuando el mismo Amado Cruz Malpica lo niegue, es evidente que las pugnas al interior de Morena están más que claras. Nahlistas, Huertistas y Eriquistas tienen sus gallos. En ese huacal ya no sé si cabe el más querido de los morenos… Amado, aunque sea por nombre, porque mientras por un lado Eric Cisneros empuja al pesista Juan Javier “El Carón” Gómez Cazarín, Manuel Huerta aprieta con Maleno Rosales Torres y se desconoce si Rocío Nahle mantenga su apoyo a Amado Cruz Malpica o en una de ésas, Amado se saque un as de la manga...

Hay algunos que apuestan a Mónica Robles Barajas…

Al final, de acuerdo con lo que dice Amado Cruz Malpica, será el jueves que se decida a quien ha de llevar las riendas de la Jucopo y de acuerdo a la designación, se verá entonces quién es el puente entre Veracruz y López Obrador.

Mientras, guste o no, Pozos Castro debe verse como el primer acierto de la aplanadora morena en la LXV Legislatura, porque en una de ésas, podemos decir que al menos los ciudadanos vamos de gane con alguien de experiencia y colmillo retorcido en política estando al frente de la Mesa Directiva.

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