Y pese a que lo anterior no representa impedimento alguno, la seriedad así como la experiencia son claves para este tipo de encargos, y más en un territorio como el que representa Veracruz en esta materia.
Asimismo, nos cuenta que otro caso enigmático es el de la empresaria xalapeña Ana Miriam Ferraez, integrante de una familia con tradición radiofónica en la entidad, a quien por cierto capitalinos nos reportan que la saludaron recientemente en la Ciudad de México, donde acudió a tratar un fuerte problema de adicción al tabaco que le está mermando seriamente su salud.
Se dice que Ana Miriam será nombrada como titular del DIF en el gobierno de la “Cuarta Transformación jarocha”, y con todo a que actualmente estudia la carrera de derecho en una Universidad Privada en la capital, la dama tampoco cuenta con la menor experiencia en estos asuntos.
Incluso, ha sido fuertemente criticada en círculos sociales tanto de Xalapa como del mismo puerto de Veracruz, ya que luego de un tormentoso divorcio digno de revistas “del corazón”, ninguno de sus cinco hijos viven con ella, confirmándose el día que rindió protesta como parlamentaria, acompañándola solamente sus padres y hermanos.
Caray, difícil caso para una dama que será la encargada del organismo garante de velar por el bienestar de las familias veracruzanas.
En fin, ya veremos qué es lo que pasa y la calidad de decisiones de Cuitláhuac García. Ojalá y no le agarre el síndrome de muchos mandatarios y empiece a tomar acciones a lo “tarugo” sólo por sentirse el “señor gobernador” y que solo sus “chicharrones truenan”.
De ser así, estaremos bien pelados.
“Mientras los necios deciden, los inteligentes deliberan”.
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