La máxima de que en política nada es circunstancial, la casualidad no existe; lo que parece, es, y la forma es fondo; toman vigencia en estos momentos de la vida política de Veracruz cuando ante la Fiscalía General de la República (FGR) el titular de Seguridad Pública y el Secretario General de Gobierno, Hugo Gutiérrez Maldonado Erick Cisneros Burgos, respectivamente, han interpuesto una denuncia en contra de varios ex funcionarios panistas del gobierno pasado de Yunes Linares, por el presunto mega-fraude cometido con la vacilada de las 6 mil 500 cámaras de video-vigilancia, que según expertos citados por el propio secretario Hugo Gutiérrez Maldonado, no funcionaban más de mil 600 y de pésima calidad, pagando por ello –por adelantado- mil 100 millones de pesos, cuando en realidad tienen un valor de 300 millones de pesos, o sea que Yunes pagó nomás 800 millones de más. Denuncia que va a proceder y que será el hilo que se jale para motivar otras acciones semejantes en contra de la más corrupta de las administraciones que hemos tenido los veracruzanos en los últimos tiempos, por encima de la de Javier Duarte de Ochoa.
Lo anterior, más la caída del principal socio político y financiero de Yunes Linares, el panista tuxpeño José de Jesús Mancha Alarcón, son sucesos que están concatenados, que van de la mano con la anuencia de quien hoy maneja los destinos de la nación, el político tabasqueño Andrés Manuel López Obrador, quien ha decidido actuar en Veracruz (se había tardado), para quitar de en medio a esa pandilla de corruptos que continúan en activo tratando de tronar la administración de Cuitláhuac García Jiménez, a través de la Fiscalía General del Estado, que todavía encabeza Jorge Winckler Ortíz, el Congreso Local donde aún permanece como diputado el adicto Sergio Hernández, y la dirigencia estatal del PAN que pretendía mantener en su poder José de Jesús Mancha Alarcón y su mamá la reportera Sergia Alarcón.
Como balde de agua helada les cayó a estos mercenarios de la política estatal, la decisión, por unanimidad, del Tribunal Electoral de Veracruz, de anular la elección en la que Mancha se quería reelegir, la cual fue impugnada por su adversario Joaquín Guzmán Avilés, un panista de viejo cuño víctima de los abusos de Yunes y los Mancha desde que se apoderaron de la franquicia del PAN veracruzano.
Las pruebas de las irregularidades
Para echar abajo (anular) la elección, los Magistrados del Tribunal Electoral argumentan que un 95 por ciento de los paquetes electorales no fueron resguardados correctamente y el 85 por ciento de los centros de votación no hubo certeza en los integrantes de las mesas ya que muchos tenían “subordinación” a Mancha Alarcón.
Por lo anterior, el TEV determinó anular el resultado de la elección y repetir el proceso interno para elegir al nuevo dirigente.
También, amonestaron a la Comisión Interna del PAN, al señalar que no tomó en cuenta al otorgar el triunfo a Pepe Mancha todas las pruebas y argumentos que presentó el candidato perdedor, mismas que fueron ignoradas.
De acuerdo a las faltas enumeradas se constató que: en 149 paquetes de los que no se constaron las firmas de representantes de los candidatos; en 63 paquetes en los que simuló que los presidentes habrían entregado pero se trataba de otras personas ajenas; hubo 11 paquetes con alteraciones.
Además de que la Comisión Estatal Organizadora (CEO) permitió la intervención de personas no acreditadas como auxiliares y no adoptó medidas para garantizar que los representantes de los candidatos pudieran ejercer su derecho de que acompañaran el traslado de los paquetes electorales desde el centro de votación, hasta la sede de la Comisión…Entre otras porquerías.
Prostituyeron el Congreso Local
Los veracruzanos tenemos los datos frescos en la memoria. De la denuncia que hizo pública, a través de un audio, la ex diputada panista Cinthya Amaranta Lobato Calderón, sobre la forma corrupta de manejar los recursos de parte de Sergio Hernández, empleado de Pepe Mancha, los cuales destinaba a financiar fiestas privadas en las que circulaba alcohol, droga y mujeres.
Ese detalle destapó la cloaca. Y es que Carlos Fuentes Urrutia, otro panista corrupto, impuesto por Sergio Hernández como administrador del pasado Congreso, era quien se encargaba de distribuir el dinero, la droga, el alcohol y hasta la muchachas para sus jefes, los diputados panistas, que para eso lo pusieron ahí. Hasta una boda en Cancún de un diputado panista, fue financiada con recursos del Congreso, y que decir de las llamadas “casas de enlace”, más de 200 que mantenía el He-Man en Xalapa, donde repartía dinero a miles de jalapeñas con tal de tener votos cautivos. Esas casas también fueron pagadas con dinero público del presupuesto del Congreso, y para desgracia de Sergio Hernández fue tan grande el repudio social que generó con sus abusos y sus adicciones en el Congreso que en las urnas fue repudiado y reprobado, perdió la elección, solo que Pepe Mancha advirtiendo esto lo metió en la lista de pluris y ahí sigue en calidad de “representante popular” seguramente de los cocos, los alcohólicos y las mujeres que se prostituyen porque eso es realmente lo suyo.
El que si salió del Congreso fue Carlos Fuentes Urrutia, conocido en el bajo mundo con el mote de “Chico Fuentes”, quien sabe porqué razones, pero la fama de lenón que se ganó al trabajar para Sergio Hernández no se la quitará nunca, aunque cuente con una fortuna en bienes y cuentas producto de lo robado durante su estancia como encargado de las finanzas de la Legislatura Local.
Mancha se agarra de lo que puede
Y bueno tras conocer la decisión del TEV, José de Jesús Mancha Alarcón, seguramente se comunicó con su jefe de inmediato, a los Estados Unidos donde huyó Miguel Ángel Yunes desde la semana anterior, para pedir instrucciones porque esto se está derrumbando. El bravucón ex gobernador instruyó a Pepe Mancha que pusiera en claro que no dejará la dirigencia estatal del PAN, tal como lo exige su compañero de partido, Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, advirtiendo que antes de precisar fecha sobre una nueva elección hay que esperar a que se agoten todas las instancias electorales.
“Es totalmente falso –dijo el Pepín- no voy a dejar la presidencia , se trata de una cuestión que esta en los estatutos y muy clara además”. Así respondió Mancha Alarcón a las declaraciones de su adversario político Joaquín Rosendo Guzmán, en el sentido de que se debe nombrar a un dirigente interno tras la anulación del proceso panista por el Tribunal Electoral de Veracruz.
Asimismo, Mancha Alarcón argumentó que es ilegal informar sobre plazos y tiempos para una nueva elección, porque falta el veredicto final de la sala regional.
“Es ilegal porque violenta la autodeterminación de los partidos políticos, ellos no pueden establecer fecha para que nosotros llevemos a cabo una elección. Se debe de esperar a que se agote la instancia, lo que están diciendo es que no les importa la siguiente impugnación e incluso ponen la fecha del 10 de mayo”, concluyó Mancha Alarcón, el hijo de la tundeteclas.
Al parecer los yunistas no se han dado cuenta de que AMLO ya tiró línea para que estos bandidos panistas sean metidos en cintura para que Cuitláhuac García pueda gobernar a los veracruzanos sin estar pendiente, o atendiendo, todos los ataques de sus adversarios de el estero. Dicen que López Obrador cuando alguien, como Yunes Linares se le atraviesa, no reconoce pactos, acuerdos ni promesas de paz y amor, le vale madre, toma la majagua más grande y abanica largo, como para desforrar la bola.
Por eso decimos desde el inicio de nuestra colaboración de hoy: en política, nada es casual.
REFLEXIÓN
Como era de esperarse, gente de nula calidad moral como Raúl Martínez Chávez y José Luis Enríquez Ambell, ahora tratan de deslindarse de su patrón Miguel Ángel Yunes Linares, del que ya hablan pestes y apenas hace unos meses lo candidateaban hasta para la presidencia de México… ¿Cómo se les llama a estos gusanos? Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx formatosiete@gmail.com www.formato7.com/columnistas |
