Después de que Cuitláhuac García anunciara que el Gobierno del Estado de Veracruz contrató un “Seguro Catastrófico”  ante desastres naturales, no faltó quien recordara el paso del huracán más devastador que haya tenido la entidad en este siglo… no, no fue Alex… tampoco Karl… muchos menos el Matthew… se habla del Huracán Fidel, quien contrató exactamente un seguro similar al que presume Cuitláhuac García y del que hasta el final de su gobierno, no se supo en qué quedó, aunque sí hubo la autorización de un crédito por 10 mil millones de pesos a menos de dos meses que terminara su administración dejando un millón de damnificados, 170 municipios afectados y un estado, inundado… de deudas.

No… no auguramos nada… sólo se recordó un suceso, allá por octubre del 2010… un mero hecho anecdótico… porque de eso también está hecha la política… de anécdotas… anécdotas que a veces se entreveran con el presente y hay quienes igual lo hacen hasta con el futuro… por ejemplo:

Cuando el Gobernador sugirió llevar a Ricardo Ahued a la subsecretaría de Finanzas, el equipo de colaboradores con los que por regular se reunía, se voltearon a ver entre ellos… ¡no podían creer lo que escuchaban! Por supuesto, nos referimos a Javier Duarte lanzando la bola… tantos años de marquesa y es seguro que quienes escucharon al cordobés, no entendieron la maniobra sugerida y entonces, allí se quedó… en el imaginario del entonces Gobernador…

Quién diría que años después, la misma idea sería concretada: llevar a Ricardo Ahued, pero a Aduanas.

A quien se le haya ocurrido aplicar la “Duartinha” a Ahued ¡es un genio! Muchos han de imaginar que Aduanas no es lo que se pudiera llamar un paraíso… muchos lo consideran un Sodoma y Gomorra y por ello había quienes pretendieron llevar allí hasta a un militar… pero bueno, la mayoría de Morena en el Senado dio el VoBo a Ricardo Ahued a quien le cuestionaban la ausencia de grado académico y el conflicto de interés que pudiera tener el empresario del plástico por ser al menos en Xalapa, un importador que se mueve con contenedores para realizar su trabajo… en descargo de don Ricardo, hasta donde alguna vez me lo contó, o lo soñé, estaba estudiando una carrera, y quizás la haya terminado pero no titulado… como le pasó a Rogelio Franco… como le pasó a Zenyazen Escobar… sobre el conflicto de interés, pues quien mejor que alguien que entienda el teje y maneje de las aduanas… pero… ¿dónde está la maldad de Javier cuando propuso llevar a la subsecretaría de Finanzas a Ahued y dónde está la maldad de AMLO al poner a don Ricardo en Aduanas? Era y es ponerlo en la casa del jabonero… aquí, en este momento, de cualquier modo, quien designó gana…

Por un lado, despresuriza por todos los ángulos, la figura de Ricardo Ahued que empezaba a hacerle sombra a Cuitláhuac García y de cierto modo, incomodaba al Pejedente con esos aires de caudillo al interior de Morena, y está claro que en la Cuarta Transformación, nadie brilla más que López Obrador. Por el otro, lleva a Aduanas, a un hombre como le gustan al tabasqueño… ¡Honesto! y si actúa así en tal cargo, es ganancia; y si no… ¡también! Que ésa era la jugada de Duarte: encochinarlo…

Pero si se cree que Morena se libró de Ricardo, está equivocado…

La imaginación política nos lleva a escenarios increíbles: Ahora que está el asunto del desacato a la SCJN por parte del Gobierno del Estado para cubrir 90 millones de pesos que adeuda al ayuntamiento de Xalapa, por ahí se asoma un hilo de posibilidad para que la Suprema Corte requiera la destitución del mandatario estatal… conste… es un “supositorio”, así que supongamos que se actúe contra Cuitláhuac, lo que nos llevaría a elecciones extraordinarias, como ocurrió en Puebla, por lo que entraría un interino y a la vez, un candidato y ahí es donde entraría don Ricardo… Exsome… ¿Y por qué el porteño? Bueno… este es un tema entre algunos diputados federales y su relación con el Pejedente, que bien podríamos continuar mañana…

Mientras nos quedamos recordando al Huracán Fidel y la propuesta de Duarte que nadie tomó en serio..

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