Escucho por la mañana, en MVS Noticias, a Marcos Miranda Cogco y las razones por las que considera es responsable el Gobierno del Estado de Veracruz tanto de su “levantón” como de su “rescate”.

Habrá gente que pueda o no estar de acuerdo con las palabras del conocido Marmiko, pero quizás en lo que sí podamos todos coincidir, es que si la voz del jarocho se escuchó en un noticiario de corte nacional, lo mínimo que se podía esperar es que una vez que concluía la entrevista, entrara la voz del Gobierno estatal para que explicara o refutara las aseveraciones en su contra…

¿A quién esperaba oír? En primera instancia, a Cuitláhuac García Jiménez, o “ya de perdis”, a Eric Cisneros Burgos… pero no, al menos hasta el tiempo que estuve escuchando la radio, nadie del Gobierno veracruzano hizo uso del derecho de réplica… ¿Un “dejar hacer, dejar pasar” de la administración estatal? Insisto… a todos nos queda en claro una cosa: Marmiko fue víctima de la privación ilegal de su libertad… pero enfilar acusaciones contra el Gobierno del Estado tales como haber sido orquestador de una maraña de tal tamaño, es algo muy serio… aunque igual de serio es el silencio que guardó el Gobierno del Estado…

¿Debe o no responder a tales acusaciones? Yo creo que sí, porque al menos la percepción que se tiene en este momento, a nivel nacional, es que si hay una víctima, ésta es un periodista y lo peor, por el ejercicio de su función y en manos de las autoridades estatales.

Sí, es posible que Iván Joseph Luna, titular de Comunicación Social de Gobierno del Estado, pudiera responder que se dio una posición al video que se viralizó de Marmiko pidiendo salir del país: “El Gobierno reitera sus esfuerzos para garantizar el Estado de derecho y libre ejercicio del periodismo para TODOS, en el caso particular de atentados, secuestros y asesinatos de periodistas exigimos que TODOS se investiguen A FONDO.”

Entiendo que con este posicionamiento del pasado 17 de este mes, dan por zanjado el “Affaire Marmiko”... y vuelta a la hoja.

Está bien… es su forma de comunicar aunque no basta en el caso del Gobierno estatal, un tuitazo… lo acepto: es el estilo de hacer política de esta nueva administración. Quizás otros gobernadores o secretarios de Gobierno, en otros tiempos, hubieran acudido a la casa de la víctima, se hubieran tomado la foto, hubieran extendido un boletín con tales imágenes y atrincherado al comunicador… pero el estilo es el hombre, reza el adagio, y como tal, creo que se debe respetar la forma en que la Cuarta Transformación entiende el quehacer de la política… pero, insisto, no puede dejar abierto el micrófono de una radiodifusora de carácter nacional, a una sola voz… porque hoy por hoy, radioescuchas de cualquier latitud y altitud del país saben que en Veracruz, el Gobierno estatal está inmiscuido en un “levantón” y “rescate” de un periodista que clama salir del país, junto con su familia, por temor a represalias.

Se ignora hasta dónde vaya a parar este ambiente tan enrarecido que hay en torno a las autoridades estatales y los señalamientos, insisto, tan graves y serios que les imputa Marmiko, pero sí se sabe que lejos de que Cuitláhuac García o Eric Cisneros se ayuden, a veces parece que confían mucho en saber que, ante cualquier contingencia política, de seguridad o del tipo que usted quiera, siempre habrá un espacio en la agenda del Pejedente para visitar Veracruz, encontrarle una nueva virtud a su predilecto, y recetarle un apapacho y palmada en la espalda a Cuitláhuac, pensando que con eso, los problemas que vive el veracruzano de a pie, quedaron resueltos…

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