Tenemos en el corto plazo, o primer corte de caja, que todo lo que se nos prometió ha pasado al baúl de la mentira y de algo más extraño aún, si recordamos a los ciudadanos de hace apenas ocho meses que reclamaban por todo lo que no les parecía, hacían mítines, tomaban los edificios de gobierno y, hacían valer su derecho de manifestación y petición. Algo extraño, con tufo a miedo o al menos precaución se respira en el ambiente.
La reciente decisión de Andrés Manuel López Obrador, de sacar a las calles al ejército (dirá que son militares. Se suaviza un poco el asunto) pero la realidad rebasa el disfraz.
Terrible, lamentable decisión del sr. Presidente. Sacar al ejército a las calles, a realizar tareas que corresponden a cuerpos civiles formados precisamente para cuidar y mantener el orden, tarea para la que están en trenados y formados.
En el caso del H. Ejército Nacional, hablamos de otra cosa y seria. El Ejército está entrenado en y para las armas (léase la guerra en defensa de la Patria) Su formación ideológica es esta. Y ponerlos en las calles no es lo correcto ni lo conveniente. Ojalá que a quién corresponda y el Presidente le escuche, validar, sopesar y emitir opinión seria; logre hacer la tarea. El Ejército Nacional, a su lugar; a cuidar a la Patria de los peligros que le acechen. ( Uno podría ser el prolegómeno a una Dictadura ) que podría resultar en una guerra intestina.
¿Que soy alarmista ¿ La historia da cuenta de muchos casos que uno en ocasiones, dudaría
Felices vacaciones. |