Cierto, le costó muchos años de caminar, hacer cuanta cosa haya tenido que hacer, y algo más llegar a la Presidencia de la República. Una vez instalado merced a que el pueblo estaba harto, hay que señalarlo- de tantos gobernantes que no cumplieron todas las expectativas de los votantes.

Pero a pesar de ello, nunca tuvimos una situación como la que por hoy –a sólo  9 meses de tener al país en sus manos—estamos viviendo:  Un señor que colocado en las alturas, lo primero que mostró fue su calidad de dictador, que recuerda en cada una de sus actitudes, hechos públicos  e inventos varios.

En este mi país, estamos conscientes de que tofos y cada uno de los presidentes que hemos tenido, han cometido errores,  serios y grandes. Pero nunca hasta este sexenio habíamos sufrido el lacerante desempleo masivo. Sin importar cuantas familias pasaron al desamparo total. 

A cambio derramó el dinero del país, “ del pueblo bueno “ en sus seguidores tan inconscientes y apátridas como él. Se dedicó a derrochar el dinero de las arcas nacionales en la colocación de los “ ni nis  y  seres que deambulaban sin oficio ni beneficio, sin formación  académica alguna, sin saber al menos un oficio. 

A cambio le partió la vida a las madres que sostienen una familia, que dejaban a sus bebés e hijos de hasta tres años en guarderías, al quitarlas con argumentos de lo más truculento y a la vez cínico. Quita de entrada la fuente de ingresos de todas las personas que se hacían cargo de las guarderías.

Y así barrió con cuanto pudo de los pilares que sostenían al país. Cerró  escuelas e instituciones de educación superior. Bajó hasta donde más pudo la aportación gubernamental a  universidades y centros de Educación Superior, que imparten pos grados de calidad. Su interés fue y es depredador. No puede tolerar de acuerdo a su diseño personal de su futuro  el de sus hijos y esposa que el país siga adelante en la digna y próspera formación de mexicanos . Él requiere con urgencia un México de semi analfabetas,  de desempleados, de hambreados.  Y así poder llevar a puerto sus muy personales y criminales ansias hitlerianas. Todo el poder en y para él.

Exactamente en la fecha que escribo esta nota, el don Presidente lanza su ley mordaza a la Prensa. Sólo le recuerdo al señor que el 68 no se ha olvidado por las nuevas generaciones. Y que no hay peor arma que un pueblo con hambre, maltratado, robado y ofendido.

Para muestra, una más, de su insidia les repito su  burla que conlleva no tan velada una amenaza a la prensa y obvio a los periodistas “ A POCO LA PRENSA NO APLAUDE “ Sr, modere su lengua    , los mexicanos en general y en este caso específico, la prensa merecen respeto. El que no se pasen llenando cuartillas en alabarlo a ud. y su pésimo gobierno no le otorga el derecho, por muy presidente que sea, a la burla, la represión y la amenaza. No despierte al tigre.