Las finanzas veracruzanas afrontan la coyuntura en mejores condiciones. Antes de la tormenta, la Secretaria de Finanzas y Planeación (Sefiplan) logró reducir la deuda estatal en 3 mil millones de pesos (mmdp), equivalentes a 9 por ciento, lo que significa que pasó de 44 mil a 41 mil millones de pesos. Además, está en curso una reestructuración de la deuda municipal contratada en 2008 mediante el esquema de bursatilización que permitiría liberar hasta 30 por ciento de los recursos empleados por los ayuntamientos para pagar los intereses y servicios de este empréstito. Igualmente, el pago oportuno de algunos rezagos financieros con el SAT y con los contratistas y proveedores hace menos severa las presiones derivadas de la pandemia. A esto también contribuye la reducción del financiamiento a los partidos políticos y los ahorros conseguidos mediante el seguimiento estricto de la política de austeridad.
En esta hora aciaga, el margen de maniobra del Gobierno Estatal será más amplio gracias a estos logros. La importancia de mantener sanas las finanzas públicas se apreciará en su justa dimensión. En primer lugar, porque Veracruz ha mejorado su condición financiera a los ojos de las calificadoras y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Se ha vuelto una entidad más confiable, que goza de buen crédito y podrá acceder a empréstitos favorables en caso necesario. En segundo lugar porque con los recursos liberados gracias a la reestructuración de la deuda y los ahorros mediante la política de austeridad se podrán implementar medidas adicionales en apoyo a las familias veracruzanas afectadas económicamente por la emergencia sanitaria.
Un primer ejemplo de esto último es la Estrategia Temporal de Apoyo a Personas Desempleadas a Causa de la Emergencia Sanitaria, generada gracias a los ahorros logrados mediante la política de austeridad instaurada por la Sefiplan. A través de este programa se entregarán recursos a 9 mil 500 veracruzanos por un monto que va de los 4 mil a los 6 mil pesos. Decenas de módulos de registro se han instalado para estos efectos a lo largo del Estado, incluyendo las Unidades Regionales del Servicio Estatal de Empleo (las inscripciones también se pueden hacer en línea en la página de la Secretaría de Trabajo, Previsión Social y Productividad).
Se trata de una medida modesta para el tamaño de las necesidades a resolver pero significativa porque apunta a un estado responsable que implementa medidas adecuadas a una crisis inédita y de dimensiones mayúsculas. Ojalá se avance por esta senda.
*Economista, latinoamericanista y asesor financiero |