La barredora de corrupción viene bajando, lenta, pero viene bajando como lo prometió en campaña y ha venido reiterando el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Esta mañana en su conferencia de prensa AMLO dijo que en varias dependencias la limpieza de la corrupción va funcionando y puso como ejemplo las aduanas a cargo del íntegro y honesto Ricardo Ahued Bardahuil -así lo dijo, no son palabras nuestras-.
Sin embargo, a decir de los productores nacionales del Textil, aunque efectivamente en esa dependencia se siente un cambio en la cabeza, no se puede decir lo mismo de los mandos medios hacia abajo, pues dijeron tener serios problemas con los voraces inspectores.
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El Presidente reconoció que efectivamente así es, como sucede con inspectores de pesca, de migración y otras dependencias y reiteró que la corrupción se está limpiando como las escaleras, ‘de arriba para abajo’ y confió que pronto las cosas van a cambiar.
Aquí es donde la sociedad puede ayudar -y mucho- en esta cruzada contra la corrupción, pues es a las personas a las que les cuesta lidiar con los funcionarios públicos corruptos y groseros que tienen la obligación de servirles: los que surten y recetan medicamentos, agentes de Tránsito, policías de caminos, cobradores de impuestos, agua, luz, aduaneros y toda una fauna de sanguijuelas a las que se debe denunciar sin miedo, tomándoles fotos, grabando sus intentos de extorsión, etc.
No se le puede dejar todo al Presidente. |
