Con firmeza Claudia respondió que también México en su autonomía podría igualar el golpe bajo de Trump y aumentar igualmente un impuesto similar a las exportaciones de los Estados Unidos a nuestro país.
Es decir, Sheinbaum no se arrugó ante las amenazas de Trump, pero al mismo tiempo tendió la mano para llegar a los acuerdos que sean necesarios para no perjudicar ni a los productores mexicanos ni a los norteamericanos que desde hace años se han asentado en el país. "No es con amenazas ni con aranceles como se atenderá la migración o el consumo de fentanilo en aquel país; la cooperación y el entendimiento son necesarios", sentenció Sheinbaum.
Tan cierto es el argumento de Sheinbaum, que el propio embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar, reaccionó esta misma mañana a las amenazas de Trump y dijo que “lo va a tener que conciliar”, es decir, Trump tendrá que sopesar que con la medida podría beneficiar por un lado a los empresarios norteamericanos locales, pero por otro estaría derrumbando a los empresarios norteamericanos radicados en México desde hace 80 años como la General Motors, mencionada como un ejemplo en la ‘Mañanera del pueblo’ de este día por la presidenta Sheinbaum.
Así que con Sheinbaum en el poder, Donald Trump quizá entienda que a México ya no se le espantará con el petate del muerto, como lo hizo en el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Así que los canillazos del día son merecidamente para el güero pendenciero Donald Trump.
(Presentación a partir del minuto 2)
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