Mire, la protesta se salió de control, pero tampoco podemos ser ilusos: así como hubo graves fallas por parte de los policías, también nunca faltan los locos y llenos de odio que aceleran a la gente sólo por querer ver el mundo arder (sí, así como lo cuenta Alfred a Bruce Wayne en “The Dark Knight”).
Existe la sospecha de que Granjas Carroll podría haber estado pagando a elementos policiacos de Fuerza Civil como su propia seguridad privada, por lo cual se entendería el porqué habrían acudido al punto y actuado de tal manera, pero es un dato sin confirmar.
Otra versión es que los manifestantes venían de Puebla y recaía la sospecha en integrantes de Antorcha Campesina, quienes recientemente bloquearon accesos en Coatepec con la misma bandera de “justicia” al medio ambiente: por eso se supone que la protesta no era real.
De cualquier manera, nadie aclara si hubo orden o no desde los altos mandos para el desalojo de la carretera. Una decisión que no pueden tomar por sí solos los jefes operativos, pues tienen que pasar por el análisis de las cabezas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y hasta de Palacio de Gobierno.
Hasta ahora los únicos que han caído en desgracia son los elementos pero no funcionarios de la SSP, que es de donde se supone habría salido la orden de un desalojo que salió muy mal, con persecución entre calles del pueblo y saldo de dos muertos.
En teoría, el desalojo le correspondía a la Guardia Nacional porque era una carretera federal bloqueada; los elementos estatales sólo llegarían a resguardar como apoyo y nada más.
No sería la primera vez que se pudiera hacer un desalojo sin recurrir a la violencia. No habría sido necesario --quizás, uno no es experto, pero ya se ha visto-- más que un despliegue de escudos bien reforzado para abrir la circulación. No había necesidad de perseguir, sólo tomar control del camino.
Y esa “talacha” de ir a buscar a los que se esconden luego de azuzar a la gente, la hacían los “madrinitas”, a los que luego se les dio placa de la Fuerza Civil.
Por cierto, uno de los seudolíderes de la “protesta” identificado como Renato Romero, ni siquiera acudió a las reuniones de toma de acuerdos para tratar de resarcir lo ocurrido en Totalco.
“Él siempre estuvo buscando exigencias. La bandera que él está usando de lo que pasó en Totalco no le queda porque no dio la cara, porque él fue a dejar la situación de lo que fue a provocar a Totalco”, señaló el diputado local por el distrito de Perote, Paul Martínez Marié, en entrevista para medios.
“Haiga sido como haiga sido”, lo de Totalco y Fuerza Civil debe servir como experiencia para el gobierno entrante, pues si bien debe haber orden y no permitir bloqueos, digamos, “extraños”, tampoco se debe acudir a la ligereza de pedir desalojar sin tener en cuenta un trabajo de inteligencia, porque los muertitos se le cargan a los políticos en turno al mando, no a los entrantes.
Este martes, el gobernador, en conferencia de prensa, dio a conocer que se realizarán nuevamente exámenes de control y confianza a los elementos de la Fuerza Civil; unos amigos policías hicieron el comentario irónico: “Futa, ahí se van a ir varios”...
La pregunta sería qué pasará con esos elementos que no pasen las pruebas y están altamente entrenados, estuvieron en una corporación estatal, conocen todos los recovecos, tuvieron hasta su propia estructura de delegaciones y están informados de temas policiacos…
Este miércoles también trascendió que una integrante de la Fuerza Civil se habría quitado la vida en las instalaciones del Mando Único de Córdoba por una discusión. Una triste señal para lo anterior, por la presión que ya seguramente los tiene reventados.
@pablojair
(DE LA "COLUMNA SIN NOMBRE")
Si quiere leer la columna completa, dé click aquí. |