NO FUE tanto el interés de los partidos políticos, PAN, PRI y PRD, para aliarse en un intento por fortalecer la candidatura de un militante, cualquiera de los que surgieran, sino más bien fue la presión de la sociedad que desde hace mucho tiempo, después de las elecciones del mes de julio del año dos mil dieciocho, comenzaron a ver la única posibilidad de emparejarse o ganar las futuras elecciones, mediante la unidad política de los principales partidos políticos, o tradicionales como se les dio en llamar, ante la fuerza demostrada por el partido político en el poder y sus consecuencias en las decisiones de los poderes federales y estatales, para buscar, ante todo, una especie de equilibrio en materia legislativa, que en todo caso es lo primero que se quiere buscar.

Lamentablemente, comenzaron a surgir las especulaciones relacionadas a la historia política de cada partido y la imposibilidad, por así decirlo, de que todas estas organizaciones políticas, llegaran a un acuerdo de unidad y buscar, entre las tres dirigencias, a un candidato, el más fuerte supuestamente para que encabezara la alianza. Incluso, se habló y aquí se comentó ampliamente, la opción de estos tres partidos, de buscar, entre la ciudadanía, a los mejores aspirantes, sin importar si fueran militantes o no en alguno de los partidos mencionados.

Finalmente, todo parece indicar, que las especulaciones tenían razón desde entonces, porque todo hace suponer que el agua y el aceite, en verdad no se pueden mezclar, aunque sea por el bien de la sociedad que les propuso desde entonces unirse para vencer al enemigo.

Aunque el PRI y el PRD, entendieron claramente el mensaje del pueblo libre de pensamiento, el PAN, inició una serie de resistencias, viendo, más que nada, por sus propios intereses políticos, dando al traste con la unidad política y con la exigencia de la sociedad.

Así parece que está sucediendo, cuando en Xalapa, no jala parejo y busca encabezar la alianza, poniendo en riesgo la propuesta ciudadana. David Velasco Chedraui Chedraui, quien hasta ayer forzaba la unidad, pidiendo al PAN, una definición, se encontraba tambaleante, pues si no renuncia a su participación, lo hará solo con el PRI, y quizá, el PRD, donde también ha afectado la simulación panista.

Sin embargo, aún existe la posibilidad de buscar un acuerdo, donde los tres partidos, le echen ganas al asunto.

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DECISIONES E INDEFINICIONES.

PARECE QUE LA decisión final del Senador de la República, con licencia, Ricardo Ahued Bardahuill, para venir a la capital del Estado, y participar en la próxima contienda por la Presidencia Municipal de Xalapa, impactó con gran fuerza en las decisiones de los partidos políticos que buscan la unidad política para competir en contra de Morena, el partido político en el poder.

Aunque se fue generando como un rumor político, ahora ya concretado, los partidos políticos, parecían resistirse a creer que el empresario veracruzano, decidiera buscar por segunda ocasión la alcaldía local, toda vez, que su posición política en el Senado de la República, era mucho más importante, políticamente hablando, sin pensar, propiamente, en las diversas circunstancias que siempre juegan un papel importante.

Esto, de alguna manera, ha movido seriamente a los partidos políticos de oposición, referente, sin duda, a quién sería el que encabezara la coalición. Ahí comenzaron los problemas, porque no se centraron en un aspirante ciudadano, ajeno a las tres organizaciones políticas, sino en sus mismas propuestas.

Ahora, esto es un verdadero desastre, porque hasta ayer no se definía claramente la situación, la cual podría terminarse con la cesión del PRI, a favor del PAN, o bien que el priismo se la juegue solo.

Mientras Ahued, y su partido Morena, solamente observan.

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LA DISYUNTIVA DE XALAPA.

SEGÚN LAS OPINIONES de algunos ciudadanos de la capital del Estado, para los votantes en las próximas elecciones, se les presenta una gran disyuntiva, porque se dice que no quieren ya a Morena, pero sí aceptan a Ricardo Ahued Bardahuill, para que sea una vez más el alcalde de la ciudad.

Cierto es que Morena, ha ido perdiendo mucha popularidad, que más bien la tenía el propio Andrés Manuel López Obrador, pero inteligentemente, buscaron a un candidato idóneo para continuar el poder municipal de su lado, quizá el único entre ellos, que puede mantener la presencia de la membresía, aunque no precisamente  la forma de gobernar.

Ahued, es un hombre comprometido con lo que hace y piensa y en ese sentido, permanentemente ha declarado que Xalapa, es para él, su prioridad, por lo que se le considera un hombre agradecido, ya que según sus propias palabras, esta ciudad y su gente, le ha dado todo, principalmente, en la prosperidad de sus negocios.

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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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