AUNQUE para muchos, la oposición política en México, y consecuentemente en la entidad veracruzana, sigue dormida, esperando quizá, los mejores momentos para actuar, la verdad de las cosas es que comienza a despertar y eso augura una buena oportunidad para los ciudadanos de todo el país, los cuales tendrán opciones concretas para buscar darle nuevo sentido al gobierno federal y estatal, así como recatar sus posiciones para garantizar un juego político equitativo, donde las fuerzas políticas sirvan para posicionar al país y al Estado, por el mejor camino en beneficio de toda los gobernados, en general.

Ya lo dijo recientemente el dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional, Marlon Ramírez Marín, que los priistas no estarán dispuestos a dejar espacios libres para el partido en el poder y que estarán en la batalla para continuar buscando las posiciones que les corresponden. De igual manera, seguramente, lo hará el panismo nacional y estatal, después de resolver sus problemas internos, sin dejar al margen al Partido de la Revolución Democrática, que poco tiene de capital político, tanto a nivel nacional como estatal, pero unido a los dos anteriores constituirán nuevamente una alianza política que estará mejor estructurada para jalar parejo en los próximos procesos electorales.

Ya el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, les acaba de lanzar el reto a todas estas organizaciones políticas, incluyendo, desde luego, al mismo partido del Movimiento Ciudadano, para que todos juntos, según se entiende, lo bajen del pedestal donde se encuentra, es decir, la Presidencia de la República, en el ejercicio democrático que se presentará en el próximo año, allá por el mes de marzo, durante el proceso de revocación de mandato, siempre y cuando, para empezar, la ciudadanía y partidos políticos, lo soliciten, cuestión que parece inevitable, pues a partir del mes de noviembre se recabarán las firmas necesarias para dar paso a este importante suceso político en la historia de México.

Veracruz, no se quedará afuera de esta consideración, por lo que también el Gobernador del Estado, se tendrá que someter a este proceso donde la ciudadanía de toda la entidad, decidirá si continúa en el cargo o de plano tenga que desocupar sus respectivas oficinas en Palacio de Gobierno.

No será fácil que los dos gobernantes, uno nacional y el otro en el Estado, que puedan salvar esta prueba, porque ya se vio en la pasada consulta popular, antecedente, pues, de lo que puede pasar en el proceso de revocación de mandato, porque la ciudadanía ya mostró, de alguna manera, su descontento al no asistir a concretar un capricho más del titular del Poder Ejecutivo Nacional.

Lo que el Presidente de la República, quiere mostrar en el proceso de revocación de mandato, es que tiene todavía el consenso popular a su favor, cuestión que, efectivamente, puede ser, pero tampoco hay que olvidar que el pueblo mexicano, ha sido lastimado por todas sus aristas, lo que significa que pudiera estarse gestando un movimiento que en lugar de apoyarlo,  lo rechazara.

Al mismo tiempo, se tendría que atender al supuestamente dormido monstruo de la oposición, que a diferencia de la consulta popular pasada, en este proceso sí metería las manos para respaldar la decisión ciudadana.

Por eso es sumamente importante saber que las dirigencias nacionales y estatales de los partidos políticos de oposición, ya están trabajando en este proceso y enviando las mejores señales de empoderamiento político en todo el territorio nacional, alentados, de alguna manera, con todos los errores de la cuarta transformación, pero sobre todo, del propio desprecio que han sufrido por parte de la primera autoridad nacional. Las descalificaciones, los atropellos, los abusos del poder, los caprichos políticos y administrativos y la falta de atención a los temas prioritarios de la nación, como son la salud y la inseguridad, están gestando el mayor repudio de la sociedad.

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EL PANISMO DE VERACRUZ, DIVIDIDO

CIERTO ES QUE internamente, el Partido político de Acción Nacional, se encuentra seriamente dividido desde hace tiempo. Tiene que resolver sus problemas internos y mostrarse nuevamente unido con la finalidad de participar activamente en la futura alianza política que tenga que integrar con los demás partidos tradicionales en todo México, y principalmente en Veracruz.

Hay que tener en cuenta que la ambición política rodea a todo el escenario del panismo veracruzano, y no se dude que, según las circunstancias que se presenten,  un miembro de la casta del estero, pudiera estar preparando un nuevo episodio político a su favor.

Por eso, el PAN, tiene que definirse en estos tiempos para poder participar con toda su fortaleza, pero sobre todo, despojado totalmente de raíz, de todo aquello que le haga daño, como le ha sucedido en los recientes tiempos en toda la entidad veracruzana.

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¿DEVERAS, VENDRÁ DANTE?

SI DANTE DELGADO RANNAURO, decidiera venir a Veracruz, para probar suerte buscando la gubernatura del Estado, un nuevo panorama político se abriría para todos los veracruzanos. Primero, pondría orden político con su sola presencia en este escenario de la sucesión veracruzana.

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Y EL LUNES, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.

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