“A los amigos leales se les admira y recuerda con alegría”
El encuentro quedó pendiente, la última vez dijimos que nos veríamos en Yecuatla, esa ocasión que me visitaste en Teocelo y del abrazo que jamás imaginamos sería el último, sonrientes y dispuestos a la charla de tantas anécdotas referentes al fútbol y naturalmente de Chinineros, del cual Alfredo Ortiz Medina, fue uno de los 12 fundadores. Fello ya murió, apenas este jueves a causa de covid allá en Yecuatla en donde años tenía de vivir con Elena, su esposa y nietos. Teocelano de corazón y chininero con amor, título de goleador en varias ocasiones corriendo con el balón por la banda izquierda, enviando centros que afortunadamente logré convertirlos en goles, zurdo natural y amigo ejemplar.
La muerte llega sin que la esperemos y eso quizás es lo misterioso, como lo fue la noticia que me dio mi hija Sagrario, ayer a la hora de la comida, para celebrar el cumpleaños de mi nieto Kenneth, festejo virtual y créanme que el cuerpo se paraliza y el recuerdo aparece inmediatamente de los últimos momentos que se habla o disfruta de la charla con el amigo ya ausente… vino el primero a mi mente cuando proveniente de Tampico, Tamaulipas, pernocté en la perfumada ciudad de Papantla, hospedándome en el Hotel Totonacapan, propiedad del ex alcalde Crispín Carreón Bandala, amigo en esos años de los setenta y tantos…
Al día siguiente, viernes lo recuerdo, me dirigí a la oficina de correos, en una empinada calle de Papantla, cercana a la iglesia en donde se venera la virgen de la Asunción, antes llamada capilla del pueblo de Santa María, construida por los franciscanos en 1570… pues en la oficina me informaron que mi amigo Fello Ortiz regresaría de entregar cartas, documentos, aproximadamente a las dos de la tarde, mientras tanto acudí a este recinto de la Asunción y admirar a un lado el gigantesco mural, obra del hijo predilecto de Papantla, Teodoro Cano… volví a correos y mi amigo Fello llegaba portando la vieja valija de cuero, su gorrita y la bicicleta a su lado, caminando…
Una tarde-noche de viernes en su hogar, brindando y festejando por el encuentro de amigos, para aceptar mi invitación esa noche a la variedad o show que estaba brindando “Francis” en el centro nocturno del Hotel en donde me hospedaba. Fuimos al espectáculo de la vedete trasvesti que por cierto, se inició en Coatepec, con el recordado Siroco de la calle de Morels…
Pasaban los años de 1972, pero al amigo Fello lo recordamos con los paisanos de Teocelo, en sus años de primaria en la “Hidalgo”, en la secundaria Manuel C. Tello y en el fútbol cuando nos dedicamos a jugar primero con Gas Amezcua en el torneo de Coatepec, posteriormente convertido en Chinineros en donde daba gusto verlo correr con el esférico de cuero y gajos, dando centros y en varias ocasiones anotando con su zurda natural que usaba con potencia. Pieza fundamental de Chinineros en la conquista de 16 títulos y siete de ellos de manera consecutiva allá por los inicios de este equipo que está a punto de cumplir 60 años y por desgracia, Fello Ortiz ya no estará presente físicamente porque su nombre, sus recuerdos en la cancha y tantas anécdotas jamás las olvidaremos… fue un gran hombre y quienes lo trataron justificarán que fue un buen ser humano, hijo de don Pancho Ortiz, un viejo obrero de la Fábrica de Hilados la Purísima de Las Puentes… Fello con chinineros toda su vida, lealtad demostrada a una camiseta negra en sus inicios, verde en muchos campeonatos y blanca ya cuando accedimos por el retiro de entre los jóvenes que ahora integran a Chinineros…
Es de hombres llorar, claro que sí, sin la hipocresía y el protagonismo, tratándose del adiós de un excelente amigo que se encuentra en el nuevo mundo en donde no existe dolor ni tristeza, el covid sigue cobrando vidas y ya en mis cercanos y queridos amigos ha penetrado hasta quitarles la vida… Fello Ortiz Medina siempre con una sola camiseta que portaba con orgullo, en los viajes de encuentros futboleros en Acayucan, en Las Vigas con el famoso Piropo y la frase “soy niño”, en el puerto de Veracruz, en Coatzacoalcos, en la ciudad de México, en Orizaba y en Huatusco, algunas de las ciudades que visitamos para cumplir compromisos de futbol de Chinineros…
Adiós Fello, segundo fundador de chinineros que nos abandona, siendo el primero José Luis Andrade Díaz, el “Borja”goleador de los años 60 en nuestro equipo… es la voluntad del Creador, es el final de la vida de cada uno de nosotros po lo que solamente afirmaremos recordando a Fello Ortiz:
Hasta pronto amigo. |