Sobre todo porque Rocío Nahle sabía, antes que muchos en el país, que otras refinerías que se construyen en el mundo como una que se localiza en Kuwait cuyo inicio de obra se realizó desde el 2012 aún no ha podido a la fecha producir gasolinas. Es decir, se ha llevado 10 años, y eso que ese país refinador lleva años de experiencia en la materia.
Pero no, Rocío Nahle convenció al Presidente Andrés Manuel López Obrador, que en este mes de diciembre del 2012 se estaría produciendo en Dos Bocas el primer barril de gasolina.
Afirmación que Rocío fue repitiendo cada vez que los cuestionamientos hacia la Refinería Olmeca arreciaban. Por ejemplo, el pasado 21 de abril Rocío garantizó que en diciembre de este año se estaría produciendo el primer barril de gasolina.
En junio 28 lo volvió a decir.
Y otra vez, el pasado 28 de noviembre Rocío Nahle volvió a declarar que los primeros barriles de gasolina y diésel de Dos Bocas, la séptima refinería de Pémex en México podrían producirse en diciembre del 2022.
Más recientemente Rocío Nahle dijo el 8 de diciembre durante su comparecencia en el Senado que la infraestructura de la refinería estaba lista para trabajar antes de que empiece el 2023, es decir, diciembre 2022. ‘Queremos meter el barril en diciembre’ Ese es el nuevo reto, dijo.
Sin embargo, a un día de que termine diciembre del 22, Dos Bocas sigue en silencio. Rocío Nahle no sale a dar la cara y decir y aceptar que sus proyecciones fallaron.
La obra que fue planeada para costar 27 mil millones de dólares ya ha costado 33 mil 726 millones de dólares, un incremento que achaca la titular de energía a los efectos inflacionarios.
La verdad es que nada pasará si la Refinería saca o no su primer barril el día que sea, lo importante es que produzca gasolinas que los sistemas funcionen y que cumpla con sus objetivos, sin embargo, en política hay un dicho que el ‘Pez por la boca muere’ y Rocío Nahle por lo visto tiene hasta dos bocas y las dos aún siguen en silencio.
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