Nos referimos a uno de ellos, de los muchos que iremos citando en columnas diarias y es nada menos que el famoso “Chon” del parque de Coatepec, aparenta seriedad y silencio y es todo lo contrario… “Mora, aquí me visitan chicas guapas, preciosas, lindas estupendas, de respeto, señoras, todas son mis amigas y las respeto, pocos tienen amistad con quienes son funcionarias de palacio de Coatepec, mira… Arely, Dary, Malu no ha sido funcionaria pero es mi gran amiga… Zú Alcántara, en su campaña estuvo aquí en trabajo.
Presume… “mi negocio está frente al Café La parroquia en Coatepec”.
Me salvé cuando se cayó el árbol del parque junto a mi negocio”. Murió Dante, de Teocelo en este accidente.
Mis amigos han sido los alcaldes, contador Torres, Millo, Miguel Angel, Galindo, Rosita, Conrado, Manolo, Juanelo, Enrique, algunos muy codos pero al menos me saludaban, comenta Chon.
De quién son esas bellotas, nueces y fruta, mi Chon…
Ahora sí salió de quien Chon.
Para mis amantes las ardillitas, vienen a comer y me besan. Siempre estoy con su alimento y ellas lo saben, y si tengo clientes se esperan, solo que al visitante que se bolea sus zapatos les gusta presenciar cómo se acercan a comer y como me dan un beso en agradecimiento, es mi premio.
A Chon lo mismo lo vemos desfilando en el Festival de las Aves como en la bajada del arco de Los Carriles, en la fiesta del barrio de San Miguel el 29 de septiembre, como en las cafeterías del centro en donde, sin pedirlo, le ofrecen café, desde un americano, un lechero como un capuchino, o se lo llevan hasta su oficina del parque… guarda revistas viejas y fotos de sus amigas que demuestra a quienes les tiene confianza. Son fotos normales, de recuerdo.
Chon, como otros personajes de Coatepec, ya son típicos y con identidad dentro del quehacer diario y en lo popular, con o sin cargo o trabajo sobresaliente y su desempeño forma parte del paisaje humano, respeta y lo respetan, dentro de sus modestos oficios, bosquejan lo curioso… saben defenderse y hablan de sus tesis que ellos ven, aprecian, palpan y les da vida. Son parte cultural de cada pueblo y muchos como Chon, realizan obras caritativas, y están en las facetas culturales que identifican, en este caso a Coatepec…
También soy poeta, me dice… soy decimero y en el vuelo las compongo, tengo esa fama. Ya mi manera de vestir me identifica y me agrada ser así… de negro el pantalón, de negro mi sombrero, pero mi conciencia blanca… soy Asunción y creo que Carmona pero me gusta más que me llamen Chon… sonríe y canta: “de quien Chon, esos ojos bonitos” y los parpadea.
Si sale de malhumor a la calle, si su día está pesado o si la suegra lo hizo enojar, - en voz baja me dijo, encabronar - vengo conmigo y aquí la pasamos a todo dar, mucho que contar y comentar, la vida es para ser feliz y amar, tener amistades y respetar, yo aquí estoy y atiendo a mis amigas como la doctora Corazón, les doy consejos para que conserven su hogar, que cuiden a sus hijos, y si necesitan un poco de dinero para comprar el pan a sus hijos, se los facilito… total, mundo ahí te quedas.
Es su filosofía de la vida, la utiliza y la disfruta… si tiene de más, reparte, si no tiene es feliz con lo que se gana en el día, la edad no le interesa ni su nombre, saluda a los turistas y les cuenta de todo, a los de “casa” les bromea y les pide que sean felices.
Nuestro amigo Chon se las sabe de todas todas, la hora en que pasa el cura de Fátima, la señora que va a la escuela por sus hijos, le vale madre que pase por su “negocio” el inflado regidor o los arrogantes empleados de confianza de palacio… “yo soy apacible, soy cordial y aunque no me inviten en las fiestas del parque me acerco y aparezco en las fotos”, pues aquí vivo, desde las siete de la mañana hasta las ocho de la noche, es mi casa y es mi oficina… también, si le da tiempo se une al grupo de dolientes que acompañan al difunto cuando salen de la misa de la iglesia de San Jerónimo… mucha gente he visto pasar por aquí en el parque, ya murieron y algunos no dejaron huella, comenta Chon, el de los ojos bonitos y picarescos, dice él.
“Soy feliz mi Mora y aquí siempre encontrarás a un amigo”.
El Chon. |