Un motociclista que baja de su unidad y arrebata el bolso de una persona. El conductor de una camioneta se percata y embiste al delincuente.
Un sujeto entra a una tienda y amenaza al personal del mostrador con una pistola. Un cliente se separa discretamente y se echa para atrás y saca una pistola. Mata al asaltante.
Sí, la respuesta es a favor de estos “Héroes” que no solo frustran el atraco, sino que, en algunos casos, acaban con la vida del infractor.
El asunto es que hasta donde nos muestran estos videos, es la parte bonita del hecho. ¿El otro lado es el más complicado… cuál lado? El legal, el judicial, el de las leyes…
Traigo a cuento esto por el caso de Irving, el joven de Boca del Río quien fue detenido por lesiones dolosas al atropellar con su vehículo a un tipo que intentaba robar a señora de 51 años, aunque en la misma nota, se informa que el atropellado igual hacía actos de exhibicionismo según lo declarado por vecinos del Infonavit Las Vegas.
Entonces, el acto heroico de Irving pasa a una cruda realidad, un trago amargo, un mal día y todo por ayudar…
Para la mayoría de los ciudadanos, la detención de Irving parece un acto de injusticia porque él no es el delincuente, el infractor es el sujeto que intentó robar y/o molestar a la señora de 51 años… pero…
¡Sinceramente no sé cómo acabe el acto heroico de Irving… espero que bien! ¡Que esté ya en su casa, que en la calle del Río Ganges igual lo reciban como lo que es, un héroe!
Pero solo para entender un poco la detención de Irving, lo que nuestras Leyes pretenden es que nadie se haga justicia por propia mano… para eso están los jueces, los que liberan a Mario Marín o pretenden dejar en libertad al priista Juan Antonio Vera Carrizal…
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