El diputado local de Veracruz, Héctor Yunes, fue invitado a salir de un hospital bajo la custodia de un policía, a lo cual se negó mientras documentaba en video las condiciones en las que se encuentra la Torre Pediátrica.

Resulta muy lamentable la falta de respeto hacia un legislador veracruzano, político de toda la vida en el estado, cuyo deber como representante popular es vigilar y garantizar que los distintos entes gubernamentales cumplan con sus responsabilidades.

Rocío Nahle ha impulsado una política de respeto hacia la verdadera oposición; por ello, este acto contra el diputado contradice de manera directa dicha política. La actitud del subdirector refleja ignorancia y una clara falta de respeto hacia un legislador con amplia credibilidad dentro del PRI, quien además ha ocupado diversos cargos públicos y podría perfilarse como próximo candidato a la gubernatura por su partido.

Aunque este hecho pudiera considerarse aislado, debe ser corregido. El sub director del hospital tendría que reconocer el error, ofrecer una disculpa pública al legislador y, de ser congruente, presentar su renuncia inmediata.