La situación cimbró a la sociedad en general. Esa parte de la población que serían incapaces de tomar algo que no es suyo, esos que mostraron una gran preocupación al sentirse expuestos por parte de la delincuencia social que se estaba originando en la entidad y que les horrorizaba ser vehículo de un acto delincuencial por parte un gran número de personas inmorales, sin civilidad y sin ética; que se dedicaron a justificar sus acciones al decir que tenían hambre. Seguramente se comerían los electrodomésticos que robaron a gran escala de las negociaciones. Nada los justificaría, y al final, se pudo detectar que el gran número de esos sectores que se dicen marginados, fueron los delincuentes potenciales que se dieron vida saqueando y destruyendo en el municipio de Veracruz. El gobierno debería de mantener a este extracto social absolutamente vigilados por siempre, y no premiarlos con despensas. Mejor que les cree fuentes de empleo para que lleven a sus casas y a sus familias los frutos de un trabajo honrado.
Pero tristemente no sólo esos sectores participaron activamente en la rapiña. Se pudo observar también a personas de una posición económica más relajada participando activamente en el hurto de los supermercados, tiendas de conveniencia, casas de empeños y demás negociaciones que fueron objeto de la rapiña. Hubo casos alarmantes como el expuesto por parte de un video aficionado el cual, dio a conocer sobre la identidad de una de las personas que saquearon en el supermercado Aurrera ubicado en el fraccionamiento Vista Mar, cerca de la Facultad de Administración (UDICA) de la Universidad Veracruzana.
A través de su video, el vecino destacó la presencia de dos mujeres, una adulta y otra más joven, quienes metían todo lo robado a la cajuela de un Stratus color blanco, el cual estacionaron muy cerca de la escalinata de acceso a donde la delincuencia social violentó para por ahí saquear el establecimiento. El video se hizo viral en las redes sociales, al grado que alguien identificó a la mujer y notificó que se trataba de la maestra de la Escuela Primaria Juan Escutia, al cual conocían como “Lolis”, la cual se hizo “famosa” en las redes sociales con el hasgtag #LadyMaestra. Esta mujer logró un gran número de críticas en su contra por la falta de moral y aludían, sobre cómo una persona con grandes faltas de valores, podía estar frente a grupo.
De acuerdo a una relación de escuelas primarias del estado localizado en el web, -http://alumnosonline.com/primarias/veracruz/veracruz.html- se logró detectar un plantel educativo con el nombre en donde ésta mujer da clases. El espacio web, se evidencia el nombre de un plantel donde supuestamente es el centro laboral de la tal “Lolis”. En el espacio web se expone el nombre de la escuela primaria, su ubicación, la clave ante la SEV y hasta el nombre de la directora de dicho espacio educativo. Advertimos, no sabemos si se refiere al mismo centro de estudios de la maestra “Lolis”, pero de acuerdo a los datos obtenidos por denunciantes quienes denunciaron y criticaron el proceder de esta mujer, hacían referencia sobre la ubicación de la escuela el cual coincide con el encontrado en el portal. Será el deber de las autoridades investigar si se refiere al mismo plantel para intentar ubicar a “Lolis” y así proceder en contra de ella de la misma forma como lo viene haciendo con el resto de los detenidos, quienes han sido mucho de ellos, localizados a través de la exposición de fotografías y videos que muchas personas han divulgado a través de sus redes sociales.
Aquí los datos específicos de la escuela localizada en la web en donde podría ser el centro de trabajo de “Lolis” es:
Escuela Primaria Juan Escutia
Clave 30DPR4616N, Turno: Matutino
Dirección: Adolfo Ruiz Cortines S/N,
Municipio y Estado: Veracruz, Veracruz.
Director: Sandra Luz Martínez Martínez
Servicio que ofrece esta escuela: Primaria General
Sostenimiento: Público
Responsable: Secretaría de Educación del Gobierno del Estado
Otro caso es el de un líder sindical del Sindicato Estatal de Trabajadores al Servicio de la Universidad Veracruzana (SETSUV) y además es empleado del anfiteatro de la Facultad de Medicina ubicado en el municipio de Veracruz. Se trata de un sujeto conocido como “El Junior”, a quien se le ve en una fotografía, muy preocupado saliendo de un supermercado que está siendo atracado –al parecer también un Aurrera- con dos paquetes de gaseosa sustraídos del establecimiento de manera ilegal. El caso fue alertado a una colega periodista de la ciudad capital, la cual luego de evidenciar la identidad del sujeto en su cuenta de Facebook, fue víctima de hasta amenazas directas de parte una persona con el nombre de Mely Garcia Garcia que al parecer conoce o tal vez es compañera de este execrable sujeto. La mujer no reparó ni un minuto en acosar, hostigar y por último amenazar a la periodista por haber expuesto la identidad del trabajador y líder sindical de la Universidad Veracruzana. Este hecho originó la motivación de la periodista para interponer una demanda legal en su contra ante la Fiscalía General del Estado (FGE), a cargo de Jorge Winckler Ortiz. Ya será la ley la cual le sancione y proceda bajo el fundamento de la ley por intimidaciones y amenazas en contra de la colega.
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