Los aviadores -durante años cobraron sin trabajar en el sector educativo- ante la alternativa de regresar a sus centros de trabajo, obstaron por jubilarse.
No es afán de incomodar a la clase gobernante, cualquiera que sea el color de su partido, simplemente que los tiempos cambian. En la actualidad existen numerosas dependencias oficiales que proporcionan información sobre los resultados de la gestión gubernamental a corto, mediano y largo plazo. El plus está en hacer comparaciones en el ámbito estatal. Con bastante nitidez se observa a lo largo del tiempo el progreso de algunas entidades federativas, y el rezago de otras, Veracruz desde los años 70´ está siempre de lado de los perdedores, gobernada con escasas excepciones, por una clase política mediocre y corrupta. Dicho lo anterior, para abordar el tema que hoy nos ocupa, he de referirme al documento “Evolución de las carencias sociales a nivel nacional 2010-2015” publicado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), justo casi el periodo de la anterior administración del gobierno estatal. La información permite conocer el comportamiento de las seis carencias sociales que conforman la medición de pobreza: rezago educativo, acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, acceso a servicios básicos en la vivienda y de acceso a la alimentación, para el periodo 2010-2015, conforme lo dicta la Ley General de Desarrollo Social.
En el estudio antes referido, sus las conclusiones no son nada favorables para la gestión del gobierno de Javier Duarte y Adolfo Mota y compañía. Resulta que nos ubicamos en las únicas tres entidades federativas que retrocedieron en la carencia social de rezago educativo, ya que aumentaron el porcentaje de población que se encuentran en esta lamentable situación: Tamaulipas (más del 13 por ciento), Coahuila (uno por ciento y Veracruz (uno por ciento), con la salvedad que los primeras dos entidades reciben población con poca educación para trabajar en las industrias maquiladoras. Del otro lado tenemos a 29 estados que disminuyeron este lastre que retrasa el progreso del país, destacando: Hidalgo, Estado de México y Chiapas, con porcentajes arriba del 25 por ciento. Aclarando que en este fenómeno social se contabiliza a las personas que no asisten a un centro de educación formal, teniendo 15 años o más de edad y no han alcanzado el nivel educativo que se considera básico.
Este resultado no sorprende, pese a la incredulidad de muchas personas bien intencionadas que sueñan con el Veracruz de ayer, con Juan de la Luz Enríquez Lara y demás. Lamentablemente con la anuencia del gobierno federal, se fue formando una mafia de sindicatos y funcionarios estatales blandos, por decir lo menos, que fueron cediendo espacios en la Secretaria de Educación, bajo el lema: dejo las manos libres y no denuncio y nos repartimos el botín. Los líderes sindicales se convirtieron en amos y señores de la educación básica, pues sobrevivían a los cambios de gobierno. Por fortuna la reforma educativa del presidente Peña Nieto cambió para bien, combate de este cáncer que se niega a morir, al concentrar nuevamente el ingreso al servicio docente mediante concurso de oposición. Agregando que los aviadores -durante años cobraron sin trabajar- ante la alternativa de regresar a sus centros de trabajo, obstaron por jubilarse. Bueno ya se ven frutos de la reforma, se abrieron nuevos puestos de trabajo en el sector educativo, esperamos que el gobierno del estado también exija un examen de competencia para ocupar puestos directivos en la Secretaria de Educación, que no se repitan los nombramientos en base a méritos de habilidades electorales.
Que se entienda, la educación según los expertos es el principal elemento para mejorar los grados de competitividad y el desarrollo de un país, en razón que el actual y futuro mercado de la mano de obra requiere altos grados de habilidades. En una pena que otras entidades federativas acaparen la inversión extranjera, por sus facilidades que proporcionan en infraestructura y educación, a pesar que entre otras bondades tenernos salida al mar y el recurso agua, pero la corrupción prevalece y con ello la inseguridad. |