El pasado martes fue presentado algo llamado Comité Ciudadano de Entrega-Recepción de la administración pública estatal.

La integraron básicamente con empresarios, dirigentes de cámaras que si bien pudieran representar a su gremio, eso no los convierte en representantes ciudadanos.

Según dijeron, sus integrantes serán garantes de la transparencia en el proceso que dicho sea de paso, no ha iniciado más que por un tema legal, por un tema de falta de voluntad política dado el encono que parece insalvable, entre quienes se van y quienes llegan.

En fin, que este dichoso comité la verdad es que a nadie emocionó y ahora será puesto a prueba.

El gobernador electo Cuitláhuac Garcia dijo que solicitará al comité le informe cuantas cámaras de vigilancia ha instalado la secretaria de seguridad pública en la entidad y de estas, cuantas están en operación.

Esperemos que Cuitláhuac haga la solicitud por la vía formal, no mediática, para que a partir de ello podamos todos valorar la utilidad de este órgano que le dicen colegiado, cuyos integrantes no fueron seleccionados por los ciudadanos y que ahora deberá probar que sirve de algo.

Insisto, más allá de los plazos legales, tiene que haber voluntad política.