“La venganza puede ser efímero o difícil de olvidar”.
Los mandamientos Lopezobradoristas, las reglas y estatutos de su personal estilo de gobernar, están fallando. No es comentario propio, es el consenso ciudadano y ahora ante la garrafal idea de solicitarles perdón al rey Felipe VI de España y al populachero Papa Francisco, pues ni suplicándole al mamoncito ese del “Chapulín Colorado”, para poder ayudarlo.
Han sido dos cartas de reclamo, podría decirse, en donde según leemos en diarios nacionales, solicitando ese perdón a los pueblos originarios de México por los abusos cometidos durante la conquista hace precisamente 500 años…cartas que de la misma manera aparecen en la cuenta de Facebook del presidente de México…
En pocas palabras, nuestro presidente se queja – como el pueblo de México también, los grupos indígenas y agrupaciones – por los asesinatos, agravios, robos, destrucción y violaciones, a lo que ahora se conoce como derechos humanos…pues sí, por desgracia, este organismo que apoya más a la delincuencia que a los agraviados, no existía y si hubiese existido, hubieran apoyado las atrocidades de los españoles…quedamos peor.
Todo sigue igual…nada ha cambiado. Matanzas e imposiciones, aceptando lo dicho por Andrés Manuel López Obrador, que la llamada conquista se hizo con la espada y con la cruz. Por ello nada hay que celebrar, fue destrucción, no conquista.
Esto ha sido una ocurrencia más para que el presidente mañanero sea el negro del cuento en donde todos le tiran, cuando estaba acostumbrado ser irónico y fuerte crítico de los presidentes del país ahora colmado de huachicoleros en abierto, de inseguridad y tantos males, cierto es, heredados, pero que AMLO se comprometió a solucionar casi de inmediato, y este ha sido el problema…promesas dentro de mandamientos pejeluterianos que son difíciles de resolver.
Muy diferente estar fuera del mostrador y otra, detrás de él. Curiosamente fue el mismo López Obrador, al insistir durante 18 años conquistar palacio nacional, bien como anhelo, bien como capricho o en verdad para lograr la Cuarta Transformación que no la vemos en su claridad.
Retornando a las cartas…el che Francisco dijo, que ellos, los del clero y su crucecita, ya respondieron al presidente de México…mientras el Rey español lamenta que la carta de AMLO se hubiera hecho pública, por lo tanto, rechaza con toda firmeza su contenido. Es decir, no le entra a esta ocurrencia que se remonta 500 años atrás.
Los fieles, los apasionados y fanáticos seguidores de Morena, se molestan ante los cuestionamientos que le hacen a su patrón, cuando lo mismo hacían ellos con los anteriores presidentes de México, bien provenientes del PRI o del PAN. Está sucediendo lo mismo, solamente que ahora el teatro ha cambiado, la escenografía, los protagonistas y el público…el PRI y socios que lo acompañan, sumándose el PAN, son los de afuera, los que cuestionan y ellos los “conquistadores” del poder ejecutivo federal, se colocaron en el banquillo de los acusados.
No pasa nada…antes en el papel de “Peje”, se manifestaba cerrando carreteras, casetas, instituciones y los que ostentaban el poder y lo mantuvieron por décadas aguantaban sus ataques, críticas y burlas, pues ahora él, colocado por sí mismo en ese lugar de palacio nacional…debe y tiene que soportar lo que antes hacia.
Para AMLO es inquietante, quiera o no aceptarlo, las frases de ¡Fuera!, de memes, de chascarrillos pensando que todas sus ocurrencias se las celebrarían y no es así…el gesto y el rostro pálido en la inauguración del estadio de beisbol de los Diablos Rojos, muestra claramente que Andrés Manuel, si se calentó. Y en los pueblos de Veracruz, es común decir que el que se calienta pierde…o lo que es lo mismo, no te calientes garnacha.
El presidente de México, ahora AMLO, no debe perder la noción de su fortaleza personal, de imagen, debe enfrentar a sus detractores no para avergonzarlos sino para demostrarle que será un presidente firme, serio y responsable…debe concentrarse hacia el futuro, con esa mentalidad que tiende que la persona se concentre en su cargo y se vuelva más fuerte…hasta feliz, vamos pues, hasta saludable.
Rechazamos venganza política, han sido cuestionamientos debido a las ocurrencias pejelagartianas, esa sed de venganza quizás que añoran los de oposición, atractiva sí, pero es un instinto primitivo que no tiene por qué presentarse, a la oposición todo se les está facilitando…
Me decía mi abuelo Toño Chama:
¡¡ Hijo…vivir bien es la mejor venganza !! |
