Quizá por ello, la entidad es tan relevante en el ámbito político nacional, que se convierte siempre en un bastión de vital importancia para los partidos políticos.
De este modo, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) prepara para su nuevo proceso de renovación de dirigencia en el 2020.
Recientemente su actual dirigencia encabezada por Jesús Velázquez Flores ejecuto de la mano con el Instituto Nacional Electoral (INE) una campaña de afiliación regulada, normada y validada por el propio árbitro electoral que permitió confirmar un padrón de militantes de 74 mil 373 militantes.
Lo que consolida al partido del Sol Azteca como una fuerza política real y con alto potencial de victoria en la entidad.
Dicha acción permite al mismo instituto político en alcanzar una consolidación como la fuerza política emergente de cara al proceso electoral intermedio del 2021.
En este proceso de renovación que se comienza a desarrollar se logran ver al menos a dos cuadros con alto potencial para alcanzar la dirigencia.
Por un lado, un ex presidente municipal de la región del Totonacapan como lo es Gregorio Gómez –ex alcalde de Tihuatlán- quien desde el 2013 ha convertido a esta región del norte veracruzano en bastión del PRD.
Tan solo en 2018, Goyo Gómez fue el segundo candidato en el país en arrastrar más votos al PRD nacional.
En el otro frente, otro ex presidente municipal de la región mágica de los Tuxltas, como lo es Sergio Cadena Martínez –dos veces alcalde de Catemaco- y actual representante del PRD ante el Organismo Público Local Electoral (Ople) Veracruz.
Todo indica que ambos cuadros se perfilan para buscar la dirigencia estatal del partido de izquierda en Veracruz.
El trabajo fino de la actual dirigencia y de algunos militantes distinguidos es trabajar en la construcción de consensos, de liderazgos, así como del incremento de afiliados para lograr mantener e incrementar la presencia del partido en los 40 municipios gobernados por el PRD.
Cabe recordar que el partido precursor en México de verdaderos movimientos de oposición que abrieron el paso para la primera de tres transiciones políticas lo ha sido el Partido del Sol Azteca.
En 2016 su fuerza permitió acabar con la hegemonía del PRI en el Gobierno de Veracruz.
Hoy el PRD habrá de llegar con un padrón limpio, validado por el INE, en donde la participación de su militancia lo alejo de esos cuadros que en antaño tanto daño le hicieron y que hoy se fustigan y desprestigian en Morena.
Al tiempo.
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