Eso no es nada nuevo.
El proceso de selección para cualquier cargo público históricamente y de manera invariable responde a negociaciones, a propuestas partidistas, a avales morales.
No hay aspirantes químicamente puros, menos en los tiempos de la 4T en donde se buscan alianzas encaminadas al afianzamiento del proyecto político que busca una permanencia transexenal.
Jacobo Alejandro Domínguez Gudini, hace algunos años ha venido manifestando su aspiración de servir a Veracruz a través del Poder Judicial.
Antes lo hizo con singular éxito en los últimos procesos electorales a través del Instituto Electoral Veracruzano después convertido en el Organismo Público Local Electoral, OPLE.
Tocaría a este preparado veracruzano la transición del PRI al PAN en el máximo cargo de poder estatal cuya postura en favor de la legalidad le valió diferencias con el candidato ganador Miguel Angel Yunes Linares “y no por su victoria que el OPLE legitimó, sino por sus actitudes despóticas y de menosprecio a los Consejeros Electorales a quienes pretendía tratar con palabras altisonantes e incluso a empellones”.
“Yo lo único que hice fue exigirle respeto a la institución recibiendo por respuesta señalamientos y advertencias posteriores de parte de sus seguidores”.
Ese pasaje y el fin de su consejería en el OPLE, lo llevaron a exiliarse por algún tiempo de Veracruz sin suspender su preparación y servicio público pero ahora desde Washington, en favor de la OEA.
Jacobo Domínguez ya mismo presenta cartas de acreditación que avalan una vida de estudios y preparación manifiesta a través del servicio público.
Busca una magistratura llevando por delante una licenciatura en Derecho, una maestría en Administración Pública, un doctorado en Derecho por la Universidad de Almería, España, así como una especialidad en Justicia Electoral.
Otras cartas de presentación:
Posgrados en Ciencia Política y Derecho Constitucional en Salamanca, España; en Derecho Penal en la Universidad de Buenos Aires, Argentina; en Administración Pública en la Academia Nacional de Gobierno de China, acreditando además su paso académico en universidades mexicanas, españolas y norteamericanas.
Su perfil académico:
Profesor titular por oposición de la Universidad Veracruzana; profesor en Derecho Internacional Público, profesor del posgrado de la Universidad de Xalapa y profesor de posgrado de la Universidad Autónoma Benito Juárez, en Derecho Constitucional y Política Electoral.
Esas son las prendas de Jacobo Domínguez Gudini, quien hasta hace unos meses representó a la Organización de Estados Americanos en Honduras.
Son prendas avaladas por un sinfín de publicaciones estatales nacionales e internacionales sobre temas jurídicos, políticos, electorales y constitucionales, al igual que su experiencia profesional a su paso por el Congreso estatal, el Banco Interamericano de Desarrollo, Consejero Ciudadano del IEV, Director Jurídico de la Oficina de Programa de Gobierno y Director de la Consejería Jurídica del Gobierno de Veracruz.
Su aspiración de ocupar una magistratura, a la luz de tan acreditada trayectoria académica y un servicio público de más de dos décadas, “es legítima de cara al proceso de selección que está por definirse”.
La moneda está en el aire.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo |