Al detener los policías federales del gobierno norteamericano, a Genaro García Luna, que fuera director de la policía federal del gobierno que surgió del fraude electoral del 2006, de Felipe Calderón, dependiente de la Procuraduría general de la República que manipuló en todo su esplendor ese ex presidente y se declaró inocente, se anidó la esperanza que todo iba a quedar sepultado en el silencio de la historia, sin embargo, ahora que vemos se arrugó del todo y comienza la negociación para obtener ventajas, podemos pensar que se conocerá toda la verdad de la que estamos ayunos.

 Así, de "protector " de la seguridad de la nación y con tantos desaparecidos y crímenes encima en el gobierno que declaró la guerra al narcotráfico, el artífice de esa lucha descomunal y desproporcionada, comenzará a soplar todos los pormenores, porque transferir y acumular tantos recursos a través de las cientos de transacciones financieras, jamás lo hace una sola persona, pues así como Medina Mora tenía su bunker en la cuarta sala de la suprema Corte de Justicia de la nación para proteger el lavado de dinero y las adquisiciones de bienes con recursos de procedencia ilícita, no es de poner en duda que así aconteció en los diversos cargos de García Luna y tan es así, que se daba el lujo de los montajes televisivos donde el periodista Loret de Mola, se le ha descubierto, como cabeza visible con el caso de la francesa.

Era tanta la ambición de la abundancia o la riqueza y de ostentar medallas en la lucha que libraba García Luna, que tendremos que conocer quien o quienes eran sus enlaces internacionales e internos, al codearse con los" machuchones " de la DEA o del FBI , lo que permitía presumir al ex presidente Calderón- el mismo a quien un empresario le entregó seis millones de pesos para la campaña de la señora del rebozo Margarita Zavala, para que fuera candidata independiente a la presidencia- los éxitos en la guerra sin cuartel, cual simple borolas , solo ha sido el ridículo y la etapa triste de la criminalidad a su más alto esplendor .

 No hay que olvidar ni dejar de recalcar, en cada momento que se tenga oportunidad, que la crisis que se vive en el país, en la inestabilidad social ,política y económica, no nació ayer en que llegó López Obrador a la presidencia de la República, sino desde el momento en que ascendió a la presidencia Vicente Fox, que al lado de su" martita" y los panistas que lo arroparon, comenzó el gran desastre que tiene su inicio en la concesión criminal de Salinas de Gortari para que Aguirre dejara la gubernatura de Guanajuato, -convertido ahora en infierno inexpugnable-y cederla al panismo.

 Si de soplones está hecho el mundo – más entre ladrones- el caso de García Luna retumbará en México y en Estado Unidos, si, como se dice que el fiscal que acusó al Chapo Guzmán y el juez que lo condenó a cadena perpetua , tiene la toga y su birrete bien puesto, por lo mismo se piensa que esto abrirá el cambio para llegar al fondo de la corrupción, que permea en materia de lavado de dinero y tráfico de personas, con independencia del correspondiente a las drogas y a las armas.

 Pocos días faltan para que se cruce información entre ambos gobiernos,-México- Estados Unidos- pues ambos participarán de los bienes mal habidos por la delincuencia y la ruta, que era una brecha, se convertirá en una avenida por donde veremos transitar a quienes ahora se han silenciado, como es el caso de empresarios, comunicadores y demás sabandijas que no se arredran, pero que han comenzado a menguar en sus actitudes de agresividad.

 No alegra mucho , que tengan que ser las autoridades del extranjero los que marquen la ruta que el país tiene que seguir, pues tal parece que la colusión es inaudita, porque el que no es cómplice , es complaciente, de ahí las sentencias del exterior que nos marcan y evidencian nuestra incapacidad para atacar nuestras deficiencias, sin embargo, la complicidad está por las nubes y una golondrina , no hace verano, pero alienta una mínima esperanza de cambio.

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