ENTRE tantas cosas que los mexicanos, en general, quisieran en este momento, es que el Gobierno federal, viera de frente los problemas y no evadiera su responsabilidad en materia de salud, de seguridad, de pobreza, de economía, de empleo, pero sobre todo, que dispusiera de un programa definido para apoyar, como se está haciendo en gran parte del mundo, a todos los empresarios que mueven, en cierta forma, la economía del país, dándoles facilidades para poder seguir adelante mientras dure la crisis económica y de salud que se ha estado padeciendo en todos los rincones del territorio nacional, así como la posibilidad de dar entrada a las inversiones extranjeras, garantizándoles seguridad en sus inversiones, bajo una política seria y de compromiso permanente a fin de que los recursos fluyan y haya creación de empleos para la mayor parte de los habitantes de esta nación que ya están desesperados por no tener lo mínimo para poder subsistir.
Al mismo tiempo, la gente quiere ver la acción del gobierno, a través de programas directos de apoyo a todos los trabajadores, que no sea con los actuales programas sociales que no cumplen con los requerimientos necesarios, sino que sea a través de las propias dependencias gubernamentales, como por ejemplo, la Secretaría de Hacienda, que bien podría decretar la suspensión del pago de impuestos en tres meses, por lo menos, así como dictar lineamientos concretos para que la Comisión Federal de Electricidad, dejara de cobrar la energía eléctrica en cuatro meses, es decir, dos cobros bimestrales, para que todo mundo tenga la posibilidad de reactivarse, pues que en la mayoría de los hogares ya no pueden ni pagar los estos servicios públicos. De igual manera, coordinarse con los ayuntamientos para que tampoco se cobre el servicio del agua en dos meses, cuando menos, pues esta concesión, que no es graciosa, sirva para que haya manera de enfrentar la dura situación económica en todo el país.
Los programas sociales que entregan una determinada cantidad de dinero a personas de edad avanzada, son buenos, pero no resuelven ciertos problemas que son directamente de quien tiene que pagar los servicios de un hogar y de una familia que espera todos los días, cuando menos, el alimento que les sirva para seguir viviendo. El Presidente de la República, debe estar consciente de que México, se le está desmoronando en sus manos, mientras se sigue invirtiendo en proyectos que no tienen, hasta ahora, plena seguridad de que van a funcionar. La cancelación de un aeropuerto, que ya estaba avanzado, ha salido muy caro a todos los mexicanos, porque se ha tenido que pagar con recursos del país, todo el costo que significó la suspensión y cancelación definitiva de esta obra, dinero que bien pudo servir para aplicarlo, ahora, a las necesidades de salud de todo el pueblo, a la compra de medicamentos que hacen falta en los hospitales públicos y en general a muchas carencias que se tienen por la crisis sanitaria y económica que viene sufriendo la población.
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Por entre la opinión pública, crece la idea de que el gobierno, deberá suspender el cobro de los servicios básicos de la gente, que es lo que se puede apreciar más en estos momentos, puesto que no tiene ya para seguir pagando la luz y otras tantas necesidades urgentes. Para eso está el gobierno, para atender estas crisis entre los gobernados, dejando de invertir en Pemex, otro ejemplo de inyección de recursos que provienen de los mexicanos, en general, a través de los impuestos, sin que se paralice la actividad, pues que las arcas nacionales, tiene los suficientes recursos que ha captado en estos dos años con el cacareado ahorro de la famosa austeridad republicana, que por cierto, no se ve por ninguna parte. Es ahora, el tiempo que ha llegado a pegar con fuerza en la vida pública nacional, cuando una buena administración del país, tiene que responder eficazmente a las demandas del pueblo mexicano, que a estas alturas, ya no siente lo duro, sino lo tupido, más cuando, debido a las restricciones sanitarias, no puede salir con libertad a buscar satisfacer sus necesidades económicas primarias y la de su familia, que en todo caso, es lo importante.
Y la demanda que hace el pueblo mexicano, no parece estar fuera de lugar, puesto que el gobierno, bien puede realizar estas acciones a favor de quienes gobierna, porque de alguna manera, algo tiene que hacer con todos los recursos que capta diariamente, a cada minuto, a cada segundo, si en situaciones como la que se está padeciendo, no entra directamente a solucionar los problemas más graves que tiene toda la población de este país. El pueblo, no tiene que demandar que se deje de pagar impuestos por un tiempo, que se suspendan pagos al gobierno, también por un tiempo, que se dejen de pagar servicios importantes como la luz, el agua, el predial, sino debiera ser el mismo gobierno, que atento a las necesidades, saliera a enfrentar estos problemas y decretara, antes de que se le exigiera, la aplicación de estas medidas a favor de todos los gobernados. Este sería el verdadero gobierno, según comenta la mayoría del pueblo mexicano.
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DE LOS CUATRO, SOLO DOS.
DE ACUERDO A como van presentándose las circunstancias política en el Estado de Veracruz, se cree, que solamente dos partidos políticos, de los cuatro que fueron aprobados recientemente para participar en el próximo evento político del dos mil veintiuno, habrá de subsistir, alcanzando el número de votos requeridos para seguir vigentes en el ámbito político estatal.
De los cuatro partidos políticos que fueron aprobados, a saber, Unidad Ciudadana Podemos, Todos por Veracruz, y Bienestar y Justicia, son los dos primeros los que tienen mayores posibilidades de lograr su cometido de mantener incólume su registro.
Lo anterior, en cierta forma, se deberá a que los partidos Unidad Ciudadana y Podemos, tienen mejor definida su estructura política y están fortaleciendo todos los días su militancia, al grado de que se les ve operando en los municipios veracruzanos, donde integran permanentemente sus cuadros municipales, que a decir de los dirigentes de Unidad Ciudadana, son la base fundamental para la subsistencia política. Desde luego, que tienen razón en sus apreciaciones y por lo tanto, saben perfectamente bien lo que están haciendo.
Por cuanto corresponde a las demás organizaciones que alcanzaron su meta, difícilmente podrán cumplir con los requisitos establecidos para mantener su registro, pues carecen de una verdadera y fuerte estructura política que los respalde, no ahora, sino después de las próximas elecciones que tendrán lugar en el mes de junio y donde, además de presentar candidatos y ganar puestos de elección popular, tendrán el compromiso y preocupación de seguir siendo partidos políticos registrados.
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QUE SI QUIEREN A AMERICO.
EN ESTOS MOMENTOS de entusiasmo político que ya invade a los veracruzanos, en general, por la proximidad de las elecciones, que según dicen, serán las más interesantes y competidas de los recientes tiempos, debido al futuro político que se estará jugando en este proceso electoral, nos hemos dado a la tarea de consultar a varios ciudadanos de esta capital veracruzana, sobre los candidatos que quisieran ver en las boletas en busca de la Presidencia Municipal de Xalapa, lo que resulta ser, hasta ahora, una buena sorpresa, porque a raíz de los diversos comentarios que se han venido haciendo en torno a la posibilidad de que Américo Zúñiga Martínez, decida volver a participar en esta contienda con el deseo de hacer un segundo gobierno municipal, después de que en el primero, se tiene entendido que llegó a realizar una buena labor municipal, se ha llegado a conocer que tiene muchos seguidores que no ven mal que el ex Secretario del Trabajo, ex Diputado local, ex Presidente Municipal de este municipio, persiga una segunda oportunidad de gobernar a Xalapa.
Algunos de los más connotados personajes que nos dieron su opinión, coincidieron en que es necesario que el ayuntamiento de Xalapa, vuelva a sus mejores tiempos, cuando la actividad era constante y había preocupación por cumplir con los deseos ciudadanos. Sí quieren, por lo tanto, que Américo, se disponga nuevamente a alzar la mano para estar en condiciones de que sus aspiraciones se tomen en cuenta.
Desde luego, que también hicieron hincapié en las decisiones partidistas de integrar alianzas, con lo que se tendría que atender otros requerimientos, pero de que hay consenso para ver nuevamente en acción política al joven político, ni se diga, pues nadie dijo que no.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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