Contrario al discurso que se ha sembrado en el país, en el que se destaca el divorcio radical entre el actual gobierno con los empresarios, se deja ver en lo expresado de manera oficial por el Consejo Mexicano de Negocios, posterior a la comida que sostuvieron con el presidente Andrés Manuel López Obrador, que esto no es así.  

“La inflación va a la baja, se están creando empleos, la economía es estable, hay un control del déficit y un Banco de México autónomo… Es por ello que los empresarios estamos tranquilos”, señaló Rolando Vega Sáenz, presidente del Consejo Mexicano de Negocios (CMN). 

En la comida, el titular de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, expuso algunos de los logros de la actual gobierno de López Obrador. Dijo que el crecimiento del PIB para 2023 será cercano al 3%; la inflación va a la baja; la recuperación del empleo gira en niveles mayores a los que había antes de la pandemia; la inversión extranjera ha crecido; el tipo de cambio ha roto récords históricos; las remesas de nuestros paisanos que han emigrado a los Estados Unidos también han crecido considerablemente; y el país cuenta hoy con un enorme potencial por el nearshoring. 

Pero lo importante -si me lo permiten- no es lo que dijo Ramírez de la O, sino ante quienes lo dijo. 

El titular de Hacienda, Ramírez de la O, no dijo lo que dijo en un mitin político o una gira de trabajo de AMLO, lo dijo ante el Consejo Mexicano de Negocios… ¡Sí! El Club de los empresarios archimillonarios del país como Carlos Slim; los Larrea, dueños del Grupo México; los Bailléres; los Almaguer de Front; Claudio X. González; Emilio Azcárraga Jean, de Televisa; los Azcárraga Andrade del Grupo Posadas; los del Valle Ruiz, de Mexichem; los Fernández Carvajal, de FEMSA; los Garza Medina, de Grupo Alfa; los Robinson Bours Almada, de Bachoco; Los Hernández de Banamex-Accival; los Sánchez Navarro, del Grupo Modelo; los Sada González, de Grupo Vitro; los Servitje Sendra, de Grupo Bimbo; y otros más. 

Es decir, no los que leen la información financiera y económica, sino quienes la producen.  

El CMN está formado por los principales empresarios en México -algunos asociados a capitales extranjeros-, creado con el fin de promover políticas públicas que impulsen la inversión y la creación de empleos. 

Es decir, el poder tras el trono presidencial del país. 

Al término de la comida con el presidente, las declaraciones de los empresarios fueron de aliento para el país al anunciar que las empresas mexicanas invertirán 30 mil millones de dólares en este 2023.  

Rolando Vega dijo que se debe aprovechar la oportunidad histórica que presenta la relocalización de las empresas, también llamado ‘nearshoring’. 

Dijo también que “hay buen futuro, hay que aprovecharlo, no viene solo. Hay que aprovechar esta oportunidad que se da… México tiene ahora un piso de crecimiento del PIB hasta del 2.3%”, por ello las inversiones permearán a toda la República Mexicana, desde el norte del país y hasta el sureste, nueva región económica que ha impulsado el presidente mexicano. 

Pero la cereza del pastel fue que los empresarios concuerdan con la información oficial que les dio el titular de Hacienda: “La inflación va a la baja, se están creando empleos, la economía es estable, hay un control del déficit y un Banco de México autónomo… Es por ello que los empresarios estamos tranquilos”. 

Así que ahí está, sobre la mesa, la otra parte del discurso, a usted querido lector le corresponde opinar al respecto. 

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