Aunque el tramo que va de Córdoba-Orizaba a Veracruz a Veracruz podría considerarse un “foco rojo” para los asaltos a camioneros, lo cierto es que de la misma forma es peligroso circular en las carreteras hacia el sur de estado, hacia el norte e incluso en la parte de Perote a Xalapa, expresó Juan Durán, delegado nacional en Veracruz de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas.
También reconoció que la situación es igual de peligrosa en todos lados del país, sin embargo, indicó que hay lugares con mayor incidencia y aquí en la entidad podría decirse que es el tramo de Córdoba-Orizaba hacia Veracruz justo donde también roban los trenes.
“Los puntos rojos para el servicio pesado es comenzando Cuitláhuac, Rancho Trejo, Córdoba, Orizaba, Balastrera y luego unos retenes falsos de la Policía Federal que están en los límites de Puebla con Veracruz, pero además en la carretera de Maltrata y donde fueron los últimos frenazos ahí también asaltan mucho transporte pesado”, expresó.
ROBAN HASTA 3 TRÁILERES AL DÍA EN CARRETERAS DE VERACRUZ
Refirió que también la zona de Perote y la de Xalapa siguen siendo focos rojos y que sólo en Plan del Río y Cerro Gordo se registran robos de camiones pesados, por lo que todo indica que esto se le salió de las manos tanto al gobierno federal como al estatal. Con respecto a la zona norte de Veracruz, dijo que también es peligrosa.
Consideró que no hay carretera segura en Veracruz y otra de las quejas es que las federales en la entidad están acabadas e incluso las autopistas están deterioradas. Resaltó que la seguridad en carreteras es de relevancia, por lo que saben que el gobernador se reunió este miércoles con el consejo de seguridad y con un alto mando de la Policía Federal de Caminos.
Reconoció que esto no es privativo de Veracruz, pues también en otros estados sufren asaltos y robos de unidades e incluso muerte de operadores.
Precisó que esta situación también les ha generado otro problema: el incremento en el pago de seguros, los cuales han subido hasta en un 400%, en detrimento del hombre camión, pues hay empresas que no aseguran su carga y todo va bajo responsabilidad del transportista.
Hay empresas de seguros que ya no quieren asegurar carros ni mercancías y si lo hacen es bajo sus precios y obviamente con primas elevadas. Expuso que el precio del seguro varía dependiendo de la carga, como las de licor, en las que el precio del seguro se eleva; la de fertilizante, cuyo costo del seguro es alto, porque un bulto cuesta entre 500 a 600 pesos y al camión le caben alrededor de 600 sacos.
CARRETERA A ACAYUCAN, UNA DE LAS MÁS PELIGROSAS DEL PAÍS
Empresas como Maseca, que es un monopolio, no paga seguro por su mercancía y si al camionero le roban la unidad con la carga la empresa prácticamente se la descuenta al transportista, porque como esa empresa no paga los fletes al momento si la carga es robada; “simplemente la descuenta de lo que te debe y el camionero además de perder su unidad pierde lo que le debía esa empresa”, refirió.
Resaltó que las únicas mercancías que llevan seguro son los contenedores, pues todo lo que se importa o exporta tiene un seguro interno; también cuentan con seguro las cementeras y una parte de la industria azucarera, señaló.
Resaltó que un seguro de cobertura amplia para una unidad nueva tiene un costo de alrededor de 80 mil pesos, y recordó que un camión de ese tipo vale alrededor de 2 millones de pesos y por eso se pagan 80 mil por año.
Ante esos costos, resaltó que han buscado el seguro de pago de daños a terceros, seguros que hoy en día valen alrededor de 20 mil pesos y hace una década valían 5 mil pesos, por lo que puede decirse que el seguro se ha incrementado en un 400%, pero además el seguro ya no acepta modelos 1990.
VIOLENCIA AZOTA VERACRUZ; SUMAN 300 HOMICIDIOS EN CASI DOS MESES
Xalapa, Ver. “En estos momentos existen personas que han huido de nuestra ciudad dejándolo todo. Tenemos incontables testimonios de personas que han sufrido la violencia. Esta semana, muchas personas fueron secuestradas, llevadas de sus casas, lejos de sus hijos, y aparecieron algunos cadáveres. Estamos ofendidos, estamos gravemente ofendidos”, decía la voz en el micrófono ante un grupo de 300 habitantes de Coatzacoalcos, Veracruz.
Este sábado, a las 17:00 horas, un grupo de 300 personas se concentró en el centro de la ciudad, frente al ayuntamiento, para exigir un alto a la violencia que predomina en la ciudad, y que se restablezca la paz y la tranquilidad.
“Estamos de luto, sentimos el dolor de las familias que han perdido alguno de sus miembros”, dijo la mujer en el micrófono que hacer un par de años perdió a su padre en un secuestro.
A las autoridades de los tres niveles de gobierno, los ciudadanos les clamaron no dejarlos solos, y hacer un destino y uso eficiente de los recursos públicos, de tal forma que se puedan realizar acciones concretas y reforzar la seguridad.
“Necesitamos que se conjunte los esfuerzos de todos los actores del gobierno estatal, involucrados en la seguridad pública, para comprometerlos de manera firme y precisa en la elaboración de planes y programas que arranquen de raíz –en el corto plazo- los graves problemas de violencia que nos devastan”.
La protesta de este fin de semana tiene lugar después de que una mujer empresaria plagiada a inicios del mes –cuando iba por su hija a casa de una amistad, apareciera decapitada en la vía pública y con un letrero de la delincuencia organizada que recriminaba el no pago del rescate.
El plantón también se inscribe en las cientos de protestas ciudadanas que diferentes sectores –maestros, petroleros, doctores, empresarios- afectados por la inseguridad llevan a cabo desde 2014, que se recrudeció la violencia en la zona.
LA CIFRAS DE LA INSEGURIDAD
Durante los primeros 70 días del gobierno de Cuitláhuac García Jiménez la inseguridad y la violencia galopan sin discriminación por todo el territorio veracruzano. Y en dos meses y medio de gestión, se han acumulado más de 300 homicidios, de los cuales 37 han sido crímenes contra mujeres, sin que hasta el momento la estrategia de seguridad de la administración morenista haya podido frenar la incidencia delictiva.
Según el último reporte de la Fiscalía General del Estado, del pasado 11 de febrero, además de los homicidios violentos, se ha disparado el secuestro; en dos meses han alcanzado la cifra de 70 casos, la mitad de todos los registrados en 2018, cuando se registraron 140 casos en todo el año. Además hay un incremento a robos a comercio y casa habitación.
Una estampa de esta inseguridad fue la que se registró este sábado en la capital del estado, donde tres personas aparecieron ejecutadas en diferentes circunstancias.
Otro ejemplo, es el intento de secuestro que sufrieron dos profesores de la secundaria general “Juana de Asbaje” en Acultzingo, Veracruz, durante la semana pasada, y que obligó a la comunidad magisterial a parar labores hasta que la autoridad diera garantías de seguridad.
La violencia ha alcanzado niveles tan complicados que la semana pasada, la iglesia católica emitió un comunicado en el que criticó los altos índices de inseguridad en la entidad, y llamó al gobierno de Cuitláhuac García a evaluar el desempeño de sus colaboradores.
Dijo en su comunicado dominical que: “¡Ya no queremos más sangre derramada en Veracruz! ¡Ya no más muertes y desapariciones! ¡No más ejecuciones, ni violencia! ¡No más dolor y miedo en la población! Queremos un Veracruz en Paz y el gobernante debe trabajar sin descanso hasta no lograrlo”.
La arquidiócesis dijo: “no estamos para improvisaciones, seguramente se necesita evaluar los resultados y la eficiencia de los colaboradores del gobierno. Hay señales claras de que algunos “recomendados” no están funcionando, y por lo mismo es tiempo de tomar decisiones. Se observa que falta oficio político y que el ambiente se está enrareciendo. No hay que esperar a que el Estado se encienda, para actuar.
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