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Edgar Hernández.
 

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Yolanda Castañeda, Presidenta del TSJ
2019-11-22

¡Trae el beneplácito de López Obrador manifiesto a través Olga Sánchez Cordero!


Bien se dice que no hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague.


El magistrado presidente del Tribunal Superior de  Justicia y del Consejo de la Judicatura, Edel Álvarez Peña, cierra su ciclo de manera por demás exitosa, declina reelegirse y el próximo 2 de diciembre ocho magistrados en representación del Poder Judicial, determinarán quien llevará las riendas de esa institución los siguientes cuatro años.


Será una mujer la que encabece uno de los tres poderes que rigen a Veracruz.


En esa tesitura, Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros, licenciada, maestra y doctora en Derecho, se coloca a la cabeza de la terna en donde aspiran Concepción Flores Saviaga, quien ya fue avisada que está imposibilitada legal y normativamente ya que no es magistrada del Tribunal Superior de Justicia y Sofía Martínez, recién habilitada como magistrada, pero con cero experiencia judicial y estrechos conocimientos en la materia.


Otros nombres que de última hora se han filtrado de parte de la estructura de poder son Isabel Inés Romero Cruz, quien carga una pesada losa al ser cesada de la quinta sala por la magistrada Teresa Álvarez, luego de la privación ilegal de libertad de una persona a quien le ocultaron un amparo ya otorgado y que al descubrirse el ilícito provocó el cese fulminante de la hoy aspirante.


Esta, Isabel Romero, ya fue recibida en días pasados por el gobernador Cuitláhuac García, quien no estaba enterado del asunto, al igual que del entramado gestado por la otra aspirante Sofía Martínez Huerta, quien ha sido señalada por guardar una estrecha relación con el leguleyo Dionisio Gutiérrez.


Este es un abogado de Poza Rica, quien introduce a Isabel y promueve dentro de la estructura de Morena. Es su padrino político que eventualmente influiría de manera determinante en los trabajos del Poder Judicial.


En la contraparte se coloca la magistrada Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros, quien goza de prestigio y respeto entre sus pares.


Es institucional y acredita un trabajo de más de cuatro décadas en 16 sedes judiciales donde se ha desempeñado.


Ha sido asimismo distinguida por la federación con el Premio Nacional al Mérito Judicial 2011, “en reconocimiento y apego a los principios y valores éticos que ha demostrado en ejercicio  de la función jurisdiccional a lo largo de su trayectoria profesional”.


Altamente calificada por su trabajo honesto, Yolanda Cecilia, es Master en Derecho Penal y criminología y en 2011 fue diplomada por la Universidad de Girona, España.


Fue además reconocida por la “University California Western School o Law, EUA” en 2015 y tiene 9 diplomados en su haber procedentes de diversas universidades, así como una veintena de acreditaciones en cursos y seminarios en Veracruz, México y el extranjero.


“Veracruz se merece un Poder Judicial digno en donde participe la mujer”, declaró en días pasados tras hacer público a la Secretaría de Gobernación de la ciudad de México, su interés por encabezar el Poder Judicial en donde empezó a laborar en 1974 como “Oficial A, escribiente”, a los 18 años.


En su presentación de motivos la aspirante hizo manifiesto ante la titular de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, que es importante preservar la autonomía e independencia del Poder Judicial, así como conducirse de manera moral y en estricto apego a la aplicación de la justicia.


La magistrada es una convencida que “La función jurisdiccional debe ser ética y digna e invariablemente desvinculada de simpatías y antipatías, por tanto, en el poder judicial no debe caber la improvisación, el arribismo, ni la mediocridad”.


“Se requieren servidores judiciales distinguidos por su capacidad profesional, honestidad y honorabilidad”, sostuvo ante este reportero quien acudió a sus oficinas en la sede del Tribunal Superior de Justicia, para preguntarle sobre sus aspiraciones.


Antes, nos mostró un legajo curricular que rebasa las 300 páginas donde acredita títulos, reconocimientos y constancias de estudios, así como una inacabada labor judicial que inicia en una oficina improvisada en Perote “que no tenía ni puerta, ni sanitario y donde ganaba mil 800 pesos al mes de salario”.


La magistrada proviene de la cultura del esfuerzo y acaso por ello, sin emitir opinión alguna –ni a favor ni en contra-  sobre las magistradas que también aspiran a encabezar el Poder Judicial, solo se remite a señalar que quien aspire “debe regirse por la honestidad y la experiencia”.


Y es que “lo más importante para quien se dedica a tan noble tarea es eso justamente, la experiencia que solo se adquiere con los años de trabajo”.


En Veracruz ya no caben “la imposición ni la recomendación”, sostuvo.


La charla, larga y muy amena, en algún momento nos remite a sus primeros años de vida, cuando alcanzó los 10, acaso 11 años, en donde su padre la encaminó por la música clásica que la llevó a formar parte de la Sinfónica de Xalapa.


Años después, la universidad y la carrera de leyes, sin embargo, le corrigieron el rumbo por lo que se decidió por el Derecho “y hoy nuestra lucha no es solo por la igualdad de género, sino por la igualdad jurídica a la cual tenemos derecho”.


“Es necesario que los ciudadanos recobren la credibilidad en la impartición de la justicia y esto solo se logrará, insisto, mediante la autonomía del Poder Judicial”.


¿Cree usted que el gobierno atente contra dicha autonomía en la renovación del Poder Judicial?, se le cuestionó.


“Por supuesto que no. El ciudadano gobernador se ha manifestado en repetidas ocasiones en favor del respeto a la división de poderes y en el Tribunal Superior de Justicia no tenemos la menor duda que así será”, respondió.


¿Quién decide, entonces?


En los próximos días habremos de reunirnos los titulares de las ocho salas para nombrar un Presidente de Debate, quien convocará a una sesión para el lunes 8 de diciembre próximo. Ahí, en cónclave secreto, emitiremos nuestro voto, también secreto y si hay empate el presidente designado decidirá”.


¿Está usted confiada?


“Mi experiencia avala mi participación. He hablado con la Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero y el sábado estaré de nuevo con ella en Bucareli; guardo una buena relación con ella que justamente fue la que me impuso el Premio Nacional al Mérito Judicial, en una ceremonia en la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.


¿Y?


“Pues ella me garantizó que se actuará con imparcialidad, pero sobre todo que se respetará la decisión que tomemos los magistrados en base a la experiencia y trayectoria”, dijo.


¿Y usted, confía?


“Totalmente. Nadie muere en la víspera. Yo estoy lista”.


Tiempo al tiempo.


*El autor es Premio Nacional de Periodismo

 
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