Que si se violenta el debido proceso al delincuente flagrante o no, este obtiene su libertad aunque exista prueba fehaciente que lo incrimine (le dictan un auto de disculpe usted) y ¿el agraviado? ¡Bien gracias!

Detener a Cesar del Ángel el líder de los cuatrocientos cueros y a Arturo Bermúdez Zurita, quien fuel el encargado de nuestra seguridad publica en el gobierno en el sexenio de don Duarte, para sus fans, críticos y aplaudidores de los priistas, las acciones judiciales deben ser apegadas estrictamente a derecho, deben tratarlos de usted, con guantes de seda, alfombra para que nos se ensucien las sandalias, de lo contrario se ve como una venganza política por no promulgar la doctrina del nuevo poder.

Existen un sinnúmero de procesados justa o injustamente por el régimen priista y en esos casos no se dice o hace algo, a ellos habría que revisarle sus casos, detectar la falta de una buena o deficiente asesoría legal, en algunos casos hasta por falta de dinero para la caución, debe haber señoras que por robarle una leche o medicamento a los chedrauis están en el tambo, eso es una indigna velación a los derechos humanos, porque la causa puede no ser justificada. pero debido a la extrema miseria en que se encuentra el grueso de la población se les puede hacer una consideración.

La justicia debe aplicarse parejo, llamar a cuentas a todo aquel que de la noche a la mañana se enriquece, es un insulto saber y ver como algunos poseen bienes que no pueden justificar con trabajo honesto, salvo el que se saca la lotería o recibe una herencia, porque de ahí para adelante solo un exitoso comerciante o profesionista llega a acumular riqueza, riqueza que no disfruta debido al tiempo que le lleva obtenerlo, son los hijos o nietos.

Pero la clase política debe estar bajo la lupa, porque la mayoría utiliza los cargos para delinquir y hacerse ricos, así que a la hora de juzgarlos hay  que hacerlo sin dolor, pero sin de dolor de nuestro corazón para que sientan lo que el ciudadano común sufre cuando pierde un familiar debido a la inseguridad, falta de medicamento o por no tener alimento suficiente.

No digo que se le torture, pero sí que sea sometido como a todo hijo de vecino, no debe existir celda especial y cómoda, debe estar con la población, comer lo mismo y con la misma vigilancia para que no se suicide o intente huir, debe trabajar para el estado, cumplir con todas las reglas internas, si la gravedad de su delito le permite obtener su libertad antes de cumplir la condena impuesta, que se le otorgue tal beneficio, pero que no se le premie por ser de la clase política del gobernante en turno.

Esto digo

adidas.johan62@gmail.com Lic. Inocencio Martínez Cortes