Para el humor cruel conozco un cuento que viene justito. Un pequeño camaroncito lloraba desconsoladamente a orillas del mar en la playa. Pasó una camarona gorda, su vecina. Pasó la camarona gorda y dijo: “¿Por qué lloras, hijo mío?” El camaroncito dijo: “Lloro porque mamá salió esta mañana y son las 10 de la noche y todavía no ha regresado”. “¿Y a dónde ha ido tu mamá?”, preguntó la camarona. “Fue a un coctel”.
Bueno, eso cubre la crueldad en el humor. Tenemos ahora el humor negro. Para eso tendríamos que irnos a África. A Sudáfrica específicamente, en donde está el Apartheid (en la época en que contaba este cuento aún no había caído el régimen racista blanco ni había llegado a la Presidencia Nelson Mandela). Los blancos por un lado y los negros por otro. Hasta en los clubes hay piscina para blancos y piscina para negros. La diferencia es que en la piscina para negros el trampolín está mucho más alto… y no tiene agua. Un club en Johannesburgo tenía un cartel en la puerta que decía: “Only White people” (“Sólo atendemos blancos”). Entró un señor negro, se sentó en una mesa y pidió un whisky. El camarero se acercó al dueño que estaba en la caja y le dijo: “Oiga, ahí entró un negro y pidió un whisky”. “¿Pidió un whisky? Cóbrale diez dólares”. Al rato regresa el camarero y le dice: “Oiga, el negro pidió otro whisky”. “Cóbrale 20 dólares”. Llega una vez más el camarero y le dice: “Oiga, el negro pidió otro whisky”. “¿Pidió otro whisky? Cóbrale 50 dólares, y de paso cambia el letrero en la puerta. Pon que sólo atendemos negros”.
Después está el humor sutil. El humor sutil no hace reír, pero hace pensar. Y es bueno pensar de vez en cuando. ¿Se han puesto ustedes a pensar alguna vez que todas las personas que están en favor de una ley que autorice el aborto, es porque ya han nacido? ¿Se han puesto ustedes a pensar alguna vez que hay muchos casos de locuras que son hereditarias? Casi siempre se heredan de los hijos. ¿Se han puesto ustedes a pensar alguna vez que si los 10 Mandamientos hubieran tenido que ser aprobados por el Congreso, apenas iríamos en el tercero?
El comunismo dice que el capitalismo esclaviza al hombre. A su vez, el capitalismo dice que el comunismo esclaviza al hombre. ¿Se han puesto ustedes a pensar alguna vez que los dos tienen razón?
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