El liderazgo de Rocío Nahle será decisivo en la dinámica interna de Morena, inclinando la balanza a favor de quienes cuenten con su apoyo. La gran pregunta es: ¿a quién permitirá crecer?

Confidencias por Evelyn Hernández. Las próximas elecciones municipales en Veracruz serán clave para reafirmar el liderazgo de Rocío Nahle, quien se perfila como la líder moral del partido. Aunque Morena no tiene “dueños”, los acuerdos internos deberán manejarse con cautela, ya que tienen un trasfondo estratégico hacia el futuro, pensando en la gubernatura dentro de seis años.

Quienes aspiren a posiciones de poder deberán colocar a sus aliados más leales en las alcaldías, ya que las 212 candidaturas municipales que se repartirán entre los liderazgos actuales de Morena deberán contar con el aval de Nahle. Sin su apoyo, nada avanzará, una realidad bien entendida dentro del partido.

La cuestión es hacia dónde se inclinará la balanza: ¿hacia los aliados de Manuel Huerta, Javier Gómez Casarín, Claudia Tello o Ricardo Ahued? Estos liderazgos están firmemente posicionados en Morena y podrían figurar en la boleta electoral en el futuro. La meta será conquistar la mayoría de las alcaldías, un objetivo que sumará adeptos a las aspiraciones de cada grupo a largo plazo.

Rocío Nahle, como política experimentada, sabrá trazar la estrategia. Morena deberá seguir esta línea y cuidar su base, asignando espacios con cautela en la designación de candidaturas. Sin embargo, algunos alcaldes con desempeños cuestionables buscarán reelegirse. Uno de los casos más sonados es el de Fernando Remes, alcalde de Poza Rica, quien en su momento presumió ser cercano al expresidente Andrés Manuel López Obrador. Este vínculo le permitió ignorar la autoridad del gobernador Cuitláhuac García. Sin embargo, con Nahle al frente, esta dinámica cambiará, y parece que Remes quedará fuera del escenario político.

En las elecciones municipales, Morena no puede confiarse. Será crucial superar las divisiones internas, los conflictos y las disputas por las candidaturas, así como manejar los intereses particulares que giran en torno a cada aspiración.

Aunque la oposición en Veracruz se encuentra debilitada —con un PRI pulverizado, un PAN dividido y un PRD prácticamente inexistente—, Morena se perfila como el favorito para ganar la mayoría de los ayuntamientos. Por su parte, Movimiento Ciudadano, partido fundado por Dante Delgado, mantiene acuerdos con Morena que podrían garantizarle algunas posiciones estratégicas.

¿Quién, entre los liderazgos mencionados, garantizará una lealtad absoluta? ¿Quién abrirá el camino y entregará el poder en los ayuntamientos, sin traicionar los intereses presentes y futuros de Rocío Nahle? Las decisiones que tome el partido respecto a las candidaturas y los resultados de las mismas serán reveladoras.

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