Se vio muy bien que en la presentación del inicio de la elaboración del Plan Veracruzano de Desarrollo hayan participado la jefa de la oficina de gobierno y el titular de Sefiplán, pues un plan sin dinero no es plan.
Importa, también saber que el Plan Operativo Anual de Rocío Nahle aprobado por el Congreso local, contiene el financiamiento a las líneas de acción urgentes detectadas durante la campaña.
Destaca la decisión de integrar en una sola dependencia la obra pública del estado, en la que se ejecutarán con un mismo criterio los más de 4 mil millones de pesos que le autorizó el Congreso, y haber traído al frente de la dependencia alguien eficaz y acostumbrado a dar resultados.
En Turismo se nota la mano de su titular en todas las actividades culturales y tradicionales para cerrar el año y jalar turistas nacionales y locales que sin duda impactarán en el alicaído ánimo de los veracruzanos.
En materia política se ha visto muy bien que se le haya dado la cancha al titular de Gobernación Ricardo Ahued para que atienda su responsabilidad de velar y asegurar la gobernabilidad interna de Veracruz.
Esto es, se puede ver un prometedor panorama del nuevo gobierno en el que es claro, no será la gobernadora quien se coma todo el pastel, lo que ha limitado el espectro de acción y encubre la mediocridad de los colaboradores, sino que habrá responsables a quienes Rocío les pedirá cuentas y será cuestión de ella si permite la mediocridad solapada y protegida que en gobiernos anteriores se permitió.
Es decir, si todo le sale bien a Rocío Nahle Veracruz saldrá ganando.
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