Lo primero que viene a la mente de cualquier persona, es preguntarse ¿Dónde está la policía?, ¿Dónde está el ejército y la Marina?, ¿Dónde está la famosa Guardia Nacional?, ¿Dónde está la autoridad estatal que tiene la plena obligación de garantizar la paz y la tranquilidad?, ¿Dónde está el gobierno federal, cuyo compromiso permanente es mantener el estado de derecho, en todo el país?.
Son interrogantes que seguramente en estos momentos, no tienen respuesta, cuando menos, un intento de respuesta que calme los ánimos de la gente, como en Oteapan, que ahora están desesperándose al grado de retar directamente a la delincuencia organizada, porque los grupos policiales o de seguridad, no hacen, prácticamente nada.
Pero, ¿Qué pasará en Veracruz, en esta parte de su territorio, cuando de verdad, haya el primer encuentro entre ciudadanía y delincuencia?
No queremos imaginar lo que puede suceder, pero sí habrá una verdadera guerra, un tanto desigual, porque los grupos armados de la delincuencia, son muchos y con armas bastante sofisticadas, cuando el pueblo dice que se defenderá solamente con el puro valor que tienen para enfrentar a estos grupos delincuenciales.
Se cree que es tiempo de que el Gobierno federal, y del Estado, tomen cartas en el asunto si no quieren ver mañana, pasado, dentro de un mes o cuando las circunstancias se presenten, un panorama desolador donde estos pueblos hayan perdido la batalla y la vida, desde luego, porque se insiste, el pueblo no está armado, no tienen preparación para enfrentar a la delincuencia, ni siquiera las estrategias suficientes para diezmar la fuerza de la delincuencia organizada y prácticamente, sin querer que suceda, será una verdadera matanza donde los responsables no serán únicamente los grupos armados de l a delincuencia, sino también las propias autoridades federales y del Estado, que desde ahora ya se están dando cuenta que los pobladores están dispuestos a enfrentarse a sus enemigos, los delincuentes, que diariamente los mantienen amenazados si no cumplen sus exigencias.
Sin duda alguna, este panorama, no es más que la evidencia de que en Veracruz, no hay gobierno, que si hay, se ha perdido la gobernabilidad y que unos cuantos han rebasado su autoridad, porque el Estado, ya no es capaz de garantizar la seguridad de los veracruzanos, en general.
Hoy, es Oteapan, mañana serán otras poblaciones que se pongan en el mismo plan de enfrentar a la delincuencia, porque no tiene apoyo gubernamental, porque no hay quien asegure la paz y la tranquilidad, porque no hay nadie que tanga la suficiente voluntad para hacer las cosas bien y sobre todo, para determinar, de una buena vez, quién manda en Veracruz.
Por ahora, la delincuencia es la que manda, pues así se ha mostrado en todo el territorio nacional y estatal, con un poder que supera a la misma policía, al mismo ejército, a la misma guardia nacional, a los mismos marinos, que si bien son muchos y con armas similares a las que porta la delincuencia, no han logrado detener esta ola de inseguridad, donde los ciudadanos en general, solamente se encomiendan a su santo protector.
Si, de verdad, resulta preocupante lo que pasa en Veracruz, porque el siguiente paso para defenderse ya se está dando y no se sabe, todavía, con qué resultados nos encontraremos en poco tiempo, cuál será el saldo que arroje esta decisión que ahora ya ha tomado el pueblo, para sustituir la fuerza del Estado.
--------------------
IPAX, OTRA VEZ, RECONOCIDO.
VALE LA PENA comentar las buenas acciones que se llevan a cabo en grupos policiacos, como el del Instituto de la Policía Auxiliar y Protección Patrimonial, para el Estado de Veracruz, que no teniendo una responsabilidad directa con la sociedad, para defenderla de la delincuencia, sí tiene la plena voluntad para intervenir cuando la seguridad de los veracruzanos, se ve amenazada.
Recientemente, la misma Secretaría de Seguridad Pública, tuvo que reconocer la valentía de uno de los elementos de la corporación del IPAX, como lo ha hecho siempre, como una muestra de que las buenas acciones no se olvidan, sino que sirven para fomentar el compromiso que cada funcionario público, llámese policía o cualquier otro, tiene ante los demás.
Y es que los policías del IPAX, tienen buena formación, al grado de que se mantienen como una de las agrupaciones policiacas con más prestigio, a pesar de ser, solamente, ocho mil elementos, pocos par trabajar, pero que lo hacen con respeto hacia quienes tienen la obligación de cuidar.
En eso hay que estar de acuerdo, porque ya son varias las ocasiones en que los policías del IPAX, se destacan por su servicio, su capacidad y su preparación para enfrentar momentos críticos de inseguridad y así lo han demostrado permanentemente.
------------------------
EL DEBER CUMPLIDO.
EDEL ÁLVAREZ PEÑA, titular del Poder Judicial del Estado, está por concluir una importante etapa de su vida pública.
Al final del mes de noviembre, concluye su tarea como Presidente del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura, con la posibilidad, eso se dice, de que pueda ser electo para un periodo más, el cual está permitido para un Magistrado, que como Edél, ha encabezado las acciones de la administración de la justicia en un periodo de tres años.
Por ahora, con el nombramiento de los trece magistrados que estaban pendientes, el Poder Judicial del Estado, se encamina, con rumbo fijo al cumplimiento de todas las tareas que tiene encomendadas, aunque en los primeros días del próximo mes de diciembre, se tenga que decidir, quien habrá de continuar al frente de esta importante instancia.
Por ahora, hay amplia consideración para que Álvarez Peña, pueda continuar en el cargo, lo que, en opinión de quienes se encuentran en el quehacer judicial, podría ser un hecho.
------------------------
Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
NUSTRO CORREO: ac_stein58@live.com.mx |