Línea Política
Agustin Contreras Stein
 

Otras entradas
2020-01-17 / Seguridad, antes que nada
2020-01-16 / Y ahora, ¿quién podrá defendernos?
2020-01-15 / Renuncia en Puebla
2020-01-15 / Vialidad, angustia permanente
2020-01-13 / Licencia: un día sí y otro también
2020-01-10 / Se acabaron los pretextos
2020-01-10 / Se acabaron los pretextos
2020-01-09 / Cadena Cerón, y el seis de enero
2020-01-08 / ¿Qué hay detrás de la honestidad?
2020-01-07 / ¿Qué pidieron los niños?
 
.
¿Y ahora, qué hacer con el avión?
2020-01-20

EL PUEBLO ahora se pregunta y con cierta preocupación, ¿Ahora qué se tiene que hacer con el avión?


Y la respuesta es hasta cierto punto la única y confiable.


Sí, el avión del gobierno mexicano, comprado para el uso del Presidente y de las necesidades que se presenten, tiene que ser usado, precisamente, para esos fines, pues aunque haya costado caro, la operación ya se hizo y no fue hace apenas unos años, sino ya que tiene el suficiente tiempo como para querer venderlo, aún cuando ni siquiera se ha pagado en su totalidad.


El Presidente, y en eso está de acuerdo casi todo el pueblo mexicano, necesita seguridad, porque se trata nada menos que del mismo representante del gobierno federal, es decir, el que manda, el que toma las decisiones de una nación, por lo que debe tener, como lo tienen casi todos los mandatarios del mundo, un transporte digno, adecuado, pero sobre todo, seguro.


Sin embargo, aquí hay tres cuestiones sobre las que habría que detenerse y pensar un poco más.


La primera, es que el Presidente, aunque no vea con malos ojos transportarse en un avión con las características del que se tiene cuestionado, no va con su también cuestionada austeridad republicana. Siente el Presidente, que el pueblo ya no le creería, como ya no le creen, de todos modos.


La segunda, es que ve, en cada parte del avión, un pasado al cual quiere terminar por completo, porque esa es su fijación, acabar con todo lo que le recuerde todos esos malos momentos anteriores donde anduvo, como todos los políticos, trabajando para llegar. López Obrador, vive del pasado y en el pasado, en el cual siente que no le fue del todo bien y que hay muchos personajes que le impidieron hacer lo que él quería hacer en el tiempo y el momento en que así creía que tenía que llegar.


La tercera, podría ser el hecho de que es un Presidente, que no sale al exterior y el avión presidencial, fue comprado, quizá, más con esta finalidad, es decir, de tener que aguantar tranquilamente largos viajes sin tener mayores problemas. La idea de deshacerse de este aparato, es porque de esa manera, justificaría su inexperiencia y su falta de capacidad para dialogar en el extranjero y frente a otros mandatarios que a leguas son, sin lugar a dudas, mucho más preparados que él. Tiene pensado no salir del país a cualquier foro internacional, porque no se sentiría bien, cómodo, como en su país, donde pueda seguir repitiendo el discurso de odio, que ya se sabe de memoria, hacia los demás, a los ex presidentes y a los mismos mexicanos, como clara venganza por tanto que se han burlado de él.


De ahí que el avión no le sirve de nada, pero que tampoco puede vender así como de la noche a la mañana. El avión, en pocas palabras, es del pueblo mexicano y debe estar al servicio del gobierno, al servicio, propiamente, de los mismos mexicanos.


Así es que la pregunta que ahora se hace en casi todos los sectores de la población al ver que el avión no se vendió, ni siquiera rebajándolo de precio, es qué hacer ahora con esta nave tan costosa y de difícil mantenimiento que solamente puede hacer el mismo gobierno nacional.


Usarlo, es la mejor opción, aunque esto no le parezca correcto al Presidente, aún cuando sabe perfectamente bien que debe hacerlo, porque mientras sea Presidente de los mexicanos, tiene que cuidarse y protegerse, no tan solo por la mayor seguridad que representa un avión de esta naturaleza, sino porque de esa manera, también evitaría andar en los aviones comerciales, donde se expone su vida, como se expone su propia investidura, la cual, a costa de lo que sea, debe respetarse.


Mientras sea Presidente de la República, tiene que serlo en toda la extensión de la palabra y eso incluye ser un personaje que los mismos mexicanos, deben arropar, porque no se trata solamente de un hombre llamado Andrés Manuel López Obrador, sino por un personaje que lleva en su persona la representación nacional en su calidad de Presidente de los Estados Unidos Mexicanos.


La opción es que use el avión presidencial, que trabaje durante un viaje, como si estuviera en sus propias oficinas, que llegue más rápido a sus compromisos y más seguro, más descansado para las actividades que tenga que realizar. De esa manera, se evitaría perder tiempo en aeropuertos, en vuelos más tardados, durante los cuales no podría trabajar a gusto y de paso, evitaría enfrentarse a tanta gente que no lo acepta, pero que se verían obligados a viajar con él.


Evitaría, en pocas palabras, muchos riesgos, hasta incluso, de un atentado, ¿Porqué no?. Evitaría que muchos pasajeros se negaran a viajar en el mismo avión comercial, porque tendrían temor y hasta cierto punto, fundado, de que hubiera algún conflicto en los vuelos, al no faltar quien se atreva a agredirlo, verbal o físicamente.


Hay muchas razones para no vender el avión y para usarlo como mejor opción. Solo basta que el Presidente, deje, por fin, de vivir el pasado, de tratar de curar sus fijaciones, de evitar esa permanente paranoia y de su plena desconfianza de todo lo que le rodea. Que le caiga el veinte de que ya es Presidente de México, como lo quería, como tantas veces lo soñó y que, finalmente, consiguió.


                                                               ------------------


QUIÉN SE ROBARA LO QUE NO HAY.


QUIERE UN LEGISLADOR de Morena, aumentar la pena para quién robe medicamentos en los centros de salud y los comercialice fuera de estos establecimientos.


La iniciativa se está preparando, aunque antes habrían de considerar dos importantes cuestiones.


Primero, que en los centros de salud, haya medicamentos, pues nadie puede robar lo que no hay. Ya se ha difundido mucho el hecho de que los hospitales, por ejemplo, del Estado, no tienen medicinas y que el gobierno no hace lo suficiente por conseguirlos.


Luego, si habría que castigar, como es lo correcto, a quien sustraiga ilegalmente estos medicamentos de los centros de salud, también habría que castigar, no necesariamente como condición del castigo al ladrón, al propio gobierno del Estado, y a los responsables de la salud en Veracruz, por no tener los medicamentos que los veracruzanos, requieren, sobre todo, aquellos que no tienen suficientes recursos para adquirirlos en otras partes.


Ambas cosas, en este caso, son delitos, uno por acción y otro por excepción.


                                                             --------------------


SE DEFIENDE EL ALCALDE DE EMILIANO ZAPATA.


TAL VEZ, POR ACCION o por recepción, pero el municipio casi totalmente conurbado con el de Xalapa, como es el caso de Emiliano Zapata, aparece en el           mapa violento nacional, como uno de los más delicados en materia de inseguridad.


Y es que, efectivamente, como lo dice el alcalde de este lugar, ahí, en su territorio, no se han conocido muchos casos violentos, pero ha sido también, el lugar para que la delincuencia deje sus huellas de todo lo que hace.


Como quiera que sea, Emiliano Zapata, es ya un punto delicado para la seguridad nacional, donde, aparentemente no hay violencia, pero que es muy común que ahí se encuentren muchas señas de la misma.


                                                            --------------------


Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.


NUESTRO CORREO: ac_stein58@live.com.mx

 
Regresar a la Página Principal
Aviso de Privacidad
 
Comentarios
 
En Política al Día nos interesa tu comentario, es por eso que creamos este espacio para tí. Aquellos mensajes que contengan un contenido vulgar, difamatorio u ofensivo, serán eliminados por el administrador del sitio. Leer normas y políticas