EN LO interno, el gobierno federal de México, se encuentra seriamente dañado. Así lo indican quienes fueron funcionarios de primer orden y que de alguna manera, nunca estuvieron de acuerdo con quien, supuestamente, manda a nivel nacional.
Así lo han manifestado ex Secretarios como Carlos Manuel Urzúa Macías, y ahora el mismo Víctor Manuel Toledo. El primero, de Hacienda y Crédito Público, que prefirió salir del gabinete, antes que sucediera otra cosa con el manejo de los recursos del país. El Segundo, del Medio ambiente y Recursos Naturales, de quien se tiene noticia, que ya recibió la instrucción de dejar la responsabilidad que tiene y que ha dicho en corto todo lo que piensa acerca de la cuarta transformación, sin esperar, siquiera, a estar fuera del equipo colaborador del primer mandatario.
Pero no son los únicos, sino otros más que por evidentes desacuerdos con el nuevo sistema político, tuvieron que dejar sus puestos para no seguir siendo parte de este gobierno, donde solamente cuenta la decisión del propio Presidente de la República, generando desconcierto y una especie de ocurrencias que no parecen funcionar hasta este momento.
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El mismo roce político que ahora se advierte con el bloque de Gobernadores, que están pidiendo la renuncia del Subsecretario de Salud, y responsable directo del asunto de la pandemia, su manejo y resultados, que también son cuestionados por gran parte de los diversos sectores de la sociedad. Todo esto, que tiene relevancia federal, ha puesto en serios problemas al mismo Presidente, quien ha decidido, de una buena vez, reunirse con los Gobernadores inconformes y buscar soluciones conjuntas relacionadas con el problema de salud que en este momento debiera ser la prioridad y evitar los intereses políticos del mandatario nacional, así como las inversiones tan costosas que se están haciendo y que dejan al país y a sus finanzas, propiamente descapitalizadas.
La anunciada reunión con los Gobernadores, es hasta ahora, considerada una buena decisión, porque de esta manera podrían salir acuerdos que beneficien a todos, principalmente a los gobernados, pues es necesario que se disponga de todo lo necesario para enfrentar el avance de la calamidad que ocupa a todo el mundo en este momento. Ya van alrededor de los cincuenta mil muertos por causas relacionadas con esta pandemia y se espera que para fin de año, las cifras estén rondando los noventa mil víctimas del famoso Covid-19, siempre y cuando no aparezca antes un fármaco que pueda curar a quienes se ven contagiados o que de plano pudiera existir una vacuna que fuera disminuyendo paulatinamente el número de afectados en todo el país.
Sin embargo, antes se tienen que tomar acuerdos y decisiones más estrictas, ya que se considera que el asunto de la pandemia se ha manejado mal desde el principio en todo el país, donde el mismo Presidente de la República, no ha puesto suficiente interés, ya que todos los días envía el mensaje contradictorio de no cuidarse, ya que no pasa nada, mientras que sus propias autoridades de salud, recomiendan el uso del cubre bocas y otros elementos de protección ante los altos números de contagios que se han estado observando en todo lo largo del territorio nacional.
Las confrontaciones nacionales, tanto de la sociedad con el gobierno federal, estatal y municipal, así como de los propios Gobernadores, y otros protagonistas de la vida nacional, sin descartar, desde luego, a los propios medios de comunicación, no llevan nunca a nada bueno y es mejor que el gobierno federal, se baje de su pedestal y que sin prepotencias ni soberbias, menos insistir en las venganzas políticas que ocupan permanentemente la mente del mandatario nacional, se ponga a trabajar conjuntamente con las demás instancias del gobierno en este país, para poder salir adelante, porque en este momento la prioridad está en el combate de la enfermedad y no los intereses personales y de grupo que en materia política se han estado escenificando.
Si se da la reunión que el Presidente, ha anunciado para celebrarse con los Gobernadores del país, el mismo mandatario nacional, tiene que llegar despojado de la grandeza que hasta ahora ha evidenciado para que haya oportunidad de platicar sobre el problema, evitando de esta manera, las confrontaciones internas y externas, pues son tiempos de unidad y no de perversas manifestaciones de poder.
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PERSISTE EL MAL EJEMPLO.
EN ESTOS MOMENTOS, corren fuertes críticas contra el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, quien en supuesta gira de trabajo por los Estados de Sonora y Sinaloa, accede a tomarse fotografías con niños, sin ponerse el cubre bocas, además de posar junto al cantante de corridos denominado “El Komander”, sin las precauciones debidas.
Hace poco, en esta misma columna hacíamos referencia al mal ejemplo que ha venido cometiendo el Presidente de la República, ante todo el pueblo mexicano, por lo que se ha considerado que gran parte de la población, más aquellos que se dicen seguidores de la cuarta transformación, siguen la misma tendencia presidencial de no hacer caso a las recomendaciones de las autoridades de salud de este país.
Nadie entiende esta actitud del primer mandatario, quien debiera ser el primero que se cuide, tanto por la investidura que representa, como por el mensaje que envía a su pueblo, el cual, por todo esto, ya no cree en el mandatario, porque se dice que todo toma a juego y ocurrencia.
Ojalá que en la próxima reunión con los Gobernadores, el Presidente, asuma otra actitud frente a este problema de salud que está padeciendo todo el pueblo mexicano.
Por lo tanto, el Presidente, sigue siendo criticado ante la evidencia de que en verdad, no le interesa, para nada, la salud de los mexicanos, en general, luego de mantener este capricho presidencial de no tomar en cuenta lo que dispone la propia Secretaría de salud, de su propio gobierno, desobedeciendo en franco reto a su propio equipo de trabajo, así como colaboradores que él mismo ha nombrado para llevar a cabo esta función.
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MEXICO, GASTANDO LO QUE NO TIENE.
SE DICE QUE EL PAIS está por entrar a una difícil fase económica, luego de que su administración no ha logrado recaudar lo suficiente en virtud de que la mayoría de empresas han estado cerrando y millones de pequeños negocios, también están haciendo lo mismo al no tener actividad normal para captar recursos, por lo que tampoco puede pagar los impuestos, cuestión que se refleja todos los días en la menor captación fiscal del gobierno.
Sin embargo, se acaba de anunciar una inversión de por lo menos doscientos cincuenta y seis mil millones de pesos, para iniciar los trabajos del corredor interoceánico que pretende, desde años, unir a los puertos de Salina Cruz, Oaxaca, con el Puerto de Coatzacoalcos, es decir, con la finalidad de ahorrar tiempo y dinero, proyecto parecido al canal de Panamá.
La inversión ha sido, en estos momentos, señalada como algo que no es prioritario, pues que primero está la salud de los mexicanos, que cumplir con estos sueños del gobierno federal. Se dice, además, que se estaría gastando dinero que no tiene en estos momentos el país, principalmente, por la baja recaudación y por lo grandes compromisos que se tienen que cumplir en referencia a la pandemia que sigue acelerando la lista cotidiana de miles de muertos por esta calamidad.
La población mexicana, esta desconcertada ante estas decisiones presidenciales, que no son, en este momento, muy adecuadas para las condiciones económicas del país.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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