1.- Extraditar de España, encarcelar y pretender fincarle un montón de años al exdirector de PEMEX, Emilio Lozoya Austin, por sobornos millonarios que recibió de la empresa brasileña Odebrecht.
2.- Extraditar de España al ‘Rey del Acero’, propietario de Altos Hornos de México, Alonso Ancira, llevarlo a prisión y obligarlo a reparar el daño al erario federal por 216 millones de dólares por haber vendido a PEMEX con un fraudulento sobreprecio la Planta de fertilizantes Agronitrogenados en Veracruz.
3.- Localizar en Israel e iniciar los trámites amistosos de extradición a México de Tomás Zerón de Lucio, requerido por la justicia mexicana por denuncias de secuestro, tortura y manipulación de evidencia en las indagatorias del caso de los 43 jóvenes desaparecidos en Ayotzinapa en 2014, cuando ocupaba el cargo de director de la Agencia de Investigación Criminal (equivalente mexicano del FBI) en el Gobierno Federal de Enrique Peña Nieto.
¡Vaya! Cuando se quiere parecer que sí se puede. En cambio, aquí otro corolario de tres famosos y presuntos delincuentes, tres poderosos exfuncionarios de gobiernos anteriores en Veracruz:
1.- El exfiscal General del Estado de Veracruz, Jorge Winckler Ortiz, a quien desde el 2019 le fue girada una orden de aprehensión en el proceso penal 296/2019.
2.- El exfiscal Anticorrupción de Veracruz, Marcos Even Torres Zamudio, quien cuenta con orden de aprehensión girada por un juez por su presunta participación en el delito de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro.
3.- El extesorero y exsubsecretario de egresos en la Secretaría de Finanzas y Planeación durante el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, Carlos Aguirre Morales, al que las autoridades fiscalizadoras y los tribunales federales le han impuesto la obligación de reintegrar a la Tesorería de la Federación en total 4 mil 227 millones de pesos, de los cuales no ya regresado un céntimo ni se ha cumplido la orden de aprehensión que existe en su contra desde hace años.
Son tres pájaros de cuenta que se han hecho ojo de hormiga y de los que el pueblo no sabe o no conoce al menos su paradero, y tampoco se informa oficialmente de ellos. Es como si se hubieran olvidado de su existencia y de hacer justicia.
Pero no solo ellos, hay más personajes que participaron presuntamente en el saqueo financiero a Veracruz durante los gobiernos de Fidel Herrera Beltrán, Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes Linares, los cuales a pesar de ser investigados y emitido contra ellos órdenes de aprehensión, nada se sabe.
¿De qué se trata? ¿A qué se debe tal impunidad o tortuguismo? ¿Quién o quiénes los protegen? ¿Están desaparecidos, los desaparecieron o simplemente no hay voluntad política de hacerlos pagar?
¡Alguien debe informar! Pero ¿quién?
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