Al enterarme de la elección como Ministra Presidente de la SCJN de la Ministra Norma Piña, lo primero que pensé fue: bueno, más vale una Ministra con carrera judicial, aun siendo una Cuatroteista propuesta por AMLO, que una deshonesta plagiaria cuya honorabilidad aún no ha quedado a salvo, excepto en la mente de AMLO y todos sus chairo-fanáticos que se han creído el cuento presidencial de que, Yazmin Esquivel, junto con Delfina Gómez, Manuel Bartlett y Gertz Manero son (Como Amlo dice, hablando con faltas de ortografía) “gentes” decentes y honradas, nadamás por el simple hecho de que lo dijo el presidente y lo que él dice es Ley y sentencia firme aunque las autoridades competentes no hayan determinado culpabilidad o inocencia.
Pero ahora tengo que reconocer que me equivoqué, no en el hecho de que la nueva Presidente de la Corte tiene una larga carrera en los tribunales, desde jueza hasta Ministra, sino en que hubiera sido propuesta por AMLO para ocupar el cargo de Ministra, ya que si yo hubiera puesto un poco más de atención habría caído en la cuenta de que proponer personas honorables, competentes y con gran experiencia en los cargos donde la Ley le permite someter a consideración a sus “corcholatas”, no es para nada el estilo de AMLO pues siempre se sujeta a su “código moral” que le indica que para “colonizar “ las instituciones nacionales solo debe proponer incondicionales con el 90% de leatlad a él y 10% de capacidad.
Al margen de que la nueva Presidente sea leal a AMLO o no, es de reconocer que contempla características idóneas para el cargo, y el hecho de ser mujer permite, de entrada, asumir que puede ser más firme ante los embates del poder, cosa que el anterior presidente nunca mostró, y que resolverá los asuntos conforme a derecho y “no pondrá a dormir el sueño de los justos” los temas que al Presidente no le convenga que se toquen, como hacía Zaldivar, ya que es conocido que la Ministra Norma Piña ha votado en conciencia y en forma autónoma diversas resoluciones de la Corte aun en contra de los deseos de AMLO.
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Al respecto es de recordar la molestia de AMLO con sus “Ministros afines” cuando han votado conforme a derecho, porque no podían hacerlo de otra forma, expresando el presidente su molestia con la frase, me equivoqué porque “ahora ponen al derecho sobre la transformación del país”, “se han olvidado de la transformación, privilegiando los procedimientos jurídicos”, todo esto acorde con la “doctrina jurídica” que rige todas sus acciones, basada en el principio de que “no me vengan con que la Ley es la Ley”
Finalmente es de reconocer que la llegada de la Ministra Piña es un buen augurio para el 2023 y que se extenderá hasta el 2026, sobre todo cuando los Ministros deben pronunciarse a la brevedad sobre la constitucionalidad o inconstitucionalidad del plan “B” electoral de AMLO, donde en aspectos muy relevantes no tendrán para donde hacerse y deberán echarlos abajo por ser manifiestamente inconstitucionales.
Esperamos mejores tiempos para el Poder Judicial a efecto de mantener intacto el régimen de División de Poderes que le da vida institucional y democrática a la Nación,
¡¡Qué así sea!! |