Confidencias por Evelyn Hernández - Me llama mucho la atención la ligereza con la que cualquier persona señala en redes sociales, sin pruebas y sin fundamentos, a la aún esposa de Ruth Alamilla, quien lamentablemente fue asesinada junto con otra persona más, ya que se le ha causado una daño moral a la ex esposa de Ruth, cuyo único pecado fue haberse casado con ella. Ruth Alamilla era una persona apreciada en la región norte del estado y si bien es cierto figuró en la vida pública, las autoridades del gobierno del estado de Puebla, donde encontraron su cuerpo junto con el de otra persona más, aseguraron que el crimen fue cometido por un grupo de la delincuencia.
El gobierno de Veracruz confirmó la misma línea de investigación y determinó que la principal línea de acción del hecho fue el crimen organizado. Según el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, todo apunta a esa línea de investigación y aunque el escándalo y la muerte de estas dos personas causó conmoción en la población, no es válido que se dañe la imagen de quien fue la esposa de Ruth Alamilla, quien cuenta con derechos y leyes que la protegen y que ahora enfrenta una lamentable desacreditación en redes sociales por parte de personajes que calumnian, difaman y acusan falsamente a una joven como ella con tal brutalidad, que amerita ser analizado el caso. No sólo por el grave crimen, sino por los daños que generan a la joven y a su familia.
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Por otra parte, los ataques no se frenan entre los aspirantes a la gobernatura de Veracruz, la despiadada campaña de desprestigio que han lanzado en contra de Rocío Nahle, por ser la supuesta dueña de propiedades en diferentes lugares del país, lo que según la oposición, representa un enriquecimiento ilícito a todas luces. La realidad es que se deben de preponderar las propuestas por parte de los candidatos a gobernador, en lugar de las campañas negras de lodo y de desprestigio entre ellos. A los veracruzanos lo que les interesa es la solución de los problemas y no el debate estéril que no conduce a nada.
En cuanto a José Francisco Yunes Zorrillla, si bien es cierto que es reconocido en todo el estado, el PRI ya no es lo que fue hace unos años, se ha perdido terreno, estructura y liderazgos. Morena sigue siendo la primera fuerza del estado y el partido en el poder y por tanto, no se puede subestimar ese hecho. Morena apostará todo a ganar la gobernatura de Veracruz y para ello no estimará en esfuerzos, aunque el pleito involucra desde luego a los Yunes, a el ex gobernador Miguel Ángel Yunes, a quien recientemente le advierten por medio de Manuel Huerta que están por sacar la famosa carpeta azul. Así que José Francisco Yunes Zorrilla no la tiene fácil, es un hombre experimentado que sabe que lo más importante para Veracruz es que se le hable de frente a los veracruzanos y se rodeen de gente que sí los apoye y no que les reste. Rocío Nahle, por su parte, el mérito y el respeto no se la quita nadie, por su condición de género, esto lo menciono por la manifestación a su favor hace unas horas para exigir respeto a sus derechos políticos y su condición de mujer. Desde luego que es justo y necesario que se respete su condición de mujer y su derecho a competir en la elección, pero yo creo que no es ahí en donde radica el problema, sino más bien en quién es responsable de su campaña, ya que no frenan ni operan políticamente para detener los ataques de la oposición. Pareciera que es su propio equipo de campaña en donde radica el verdadero problema, esto ante la falta de maniobra, de contención política y de alcance para frenar todos los ataques en su contra. Pese a esto, actualmente Morena encabeza preferencias en Veracruz rumbo a la gobernatura, aunque el candidato de la oposición parece acercarse con rapidez en el primer tramo de la elección. |
