El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, salió una vez más a los medios de comunicación y a las redes sociales para hablar del proceso penal que se sigue en su contra.
Desmiente el contenido de una nota informativa publicada por el periódico Reforma y asegura que no sólo no recibió beneficio alguno por parte de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda, en los tiempos del gobierno de Enrique Peña Nieto, sino que justamente fue esa instancia de gobierno la que actuó en su contra y la que lo mantiene en la cárcel.
En realidad se trata de un artículo en el que se acumulan datos que ya eran públicos, pero que fueron encadenados de tal manera que se pudiera sospechar una “conjura” para favorecer a Javier Duarte.
El periódico Reforma publicó este lunes que el ex gobernador de Veracruz podría seguir su proceso fuera de prisión “gracias a que le echaron una manota” desde la Unidad de Inteligencia Financiera, tres meses antes de que concluyera el sexenio de Enrique Peña Nieto.
El artículo narra que el 21 de agosto de 2018, el entonces titular de la UIF, Mauricio Moreno Balbuena, solicitó a la PGR retirarle al ex Gobernador de Veracruz la acusación del delito más grave que tenía su proceso, el de delincuencia organizada y por el cual Javier Duarte no podría obtener, ni pelear legalmente por su libertad, ni con derecho a fianza.
Explica que dos días después, Arturo Elías Beltrán, encargado de despacho de la PGR, anunció la reclasificación del delito por el de asociación delictuosa por cometer peculado, el cual no amerita prisión preventiva oficiosa.
El periódico presume haber incorporado un dato nuevo en este caso: “Hasta hoy no se sabía que la decisión de la PGR de reducir la acusación contra Duarte fue gracias al alegato presentado por Moreno Balbuena desde la UIF en el oficio 110/E/989/2018, al que hoy se tuvo acceso”.
La historia es mucho más simple.
En efecto, la Unidad de Inteligencia Financiera y la PGR optaron por modificar el delito que se le atribuía a Javier Duarte, pero esto obedeció a que luego de una exhaustiva investigación se dieron cuenta de que no tenían los elementos suficientes para soportar la denuncia por delincuencia organizada.
El riesgo de irse por el delito más grave, sería que al final Javier Duarte de Ochoa fuera exonerado. Para lo que sí les alcanzaba la documentación acumulada, era para atribuirle el delito de asociación delictuosa, que amerita una sentencia menor, pero –según los cálculos de la PGR y la UIF- sería más sólido su expediente.
La postura en aquella ocasión del titular de la UIF, Mauricio Moreno Balbuena, fue muy clara al respecto:
“La conducta imputada a Javier Duarte de Ochoa no se adecua a los extremos jurídicos para actualizar la delincuencia organizada, sino la de asociación delictuosa, ello en razón de que no se actualiza el sentido de permanencia a una organización criminal”.
Lo que no tomaron en cuenta, al armar la carpeta de investigación en contra de Javier Duarte, fue en la irregularidad de haber obtenido las pruebas documentales de las instituciones bancarias, sin contar con el respaldo de una orden judicial, un elemento que todos los involucrados en el mismo caso han utilizado para que los juzgadores desestimen –por haber sido obtenidos de manera irregular- esos datos de prueba.
Javier Duarte no habla de tiempos para que se dé la posibilidad de abandonar la prisión, pero eso parece más un acto de prudencia aconsejado por sus abogados. Lo cierto es que la posibilidad de que sea admitida su apelación a la sentencia se ve más cercana, luego de que el Primer Tribunal Colegiado Penal en la Ciudad de México dio entrada a la demanda de amparo directo que promovió contra el acuerdo de un juez de control, que desechó su apelación.
Javier Duarte no habla de ello pero, a partir de su creciente actividad en los medios, especialistas en la materia sugieren que a finales del presente año, o principios del próximo, podría estar obteniendo su libertad.
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Epílogo.
La consigna de Joaquín Guzmán Avilés para conseguir el apoyo del panismo veracruzano es contundente: “#EsHora de regresar al PAN que conocíamos, nuestra doctrina y principios deben ser siempre la base para la construcción de un partido donde toda la militancia tenga las mismas oportunidades”. *** Sus argumentos están basados en el retorno a los principios básicos del PAN y en la construcción de la unidad interna, para presentarse sólidos hacia el exterior. “Queremos ir sumando e ir fortaleciendo al Partido, queremos tener un partido coherente con lo que dice y lo que hace y así crear unidad para prepararnos para el 2021 y sobre todo para el 2024, tenemos un partido que tiene la posibilidad de ganar porque el actual Gobierno del Estado no está haciendo lo que prometió, está fallándole a los ciudadanos”. *** Ya se ven las consecuencias de no aplicar una política coherente en el tema de los bloqueos y tomas de edificios públicos. Apenas el fin de semana la policía estatal reprimió a ciudadanos de Chicontepec que bloqueaban la carretera frente a la Secretaría de Educación, y este lunes otro grupo, ahora docentes de la Federación de Sindicatos Magisteriales de Veracruz, integrada por siete organizaciones sindicales estatales, tomaron las instalaciones de la SEV. Denunciaron la “cerrazón” de las autoridades e impidieron la entrada a los trabajadores a las instalaciones. ¿Dónde están las fuerzas del orden? ¿Por qué estos sí pueden y los otros no?
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