Sin embargo, para México, sería un grave problema que en estos días, meses quizá, el famoso coronavirus, se presentara por la sencilla razón de que aunque se diga que no, el sector salud del país no está preparado para enfrentar esta nueva calamidad. Por ahora, hay tiempo de prepararse, pero al parecer esto no se toma en consideración, ya que se sabe que ni siquiera la precauciones debidas se han tomado en cuenta y las principales entradas de personas y consecuentemente de enfermedades trasmisibles, no han sido valoradas, de tal manera que los aeropuertos, puertos e incluso por la vía terrestre, no son, todavía, un tema que deba preocuparles a las autoridades sanitarias.
Es por eso que México, estando expuesto como todos los países del mundo al ingreso de estos virus, debiera poner en marcha los protocolos de sanidad, de tal manera que haga falta o no, lo importante es que haya la previsión adecuada y se pueda manejar posteriormente el problema, sobre todo, cuando no se tienen los medicamentos que pudieran tener la eficacia para el tratamiento.
No se sabe, porque hasta estos momentos no se ha informado adecuadamente, si ya existe alguna vacuna o un tratamiento definido, de tal manera, que se pueda aplicar en el momento preciso, ya que de lo contrario, se estaría poniendo en riesgo la vida de millones de mexicanos, luego de que también no se ha determinado que tipo de virus es y como puede combatirse. La propagación puede ser inmediata si se llega a detectar algún caso debidamente confirmado, por lo que pronto se convertiría en una epidemia difícil de resolver.
Para los médicos mexicanos, el coronavirus puede presentarse en cualquier momento y para ello estarían listos, pero haría falta infraestructura adecuada y medicamentos, sobre todo, los medicamentos que ya estén probados por su eficacia, pues es de considerarse preocupante esta parte del sector salud, ya que en los recientes meses ha tenido este grave problema de no tener medicamentos especializados para el tratamiento de las enfermedades que aqueja a gran parte de los habitantes de este país y la presencia de otra enfermedad, como la que se viene detectando en el mundo, pondría en muchos problemas al sector salud, pero sobre todo, al propio gobierno mexicano, el cual estaría obligado a enfrentar este tipo de padecimientos.
Como ya se comentaba, ahora todavía es tiempo de tomar las cosas con mucha seriedad y dejar, siquiera por un tiempo, la serie de ocurrencias que se generan en el sector público, para concentrarse en los problemas de salud que pudieran presentarse en breve.
No es cosa adoptar posiciones políticas ni nada por el estilo, sino de buscar alternativas de solución ante la posibilidad de que este virus que ya se mueve por todo el mundo, pueda llegar a nuestro país, con la fuerza de penetración que no se desea, pues para erradicarlo posteriormente, sería demasiado difícil y tarde, además, para poder combatirlo con precisión y salvar a la población de todo el país que de alguna manera se encuentra expuesta a contagiarse.
Aunque no se quiera aceptar, en este momento, el sector salud del país, no se encuentra preparado para esta lucha y aunque se tienen muchos hospitales, médicos y muchas otras cosas, la verdad es que no hay medicamentos adecuados, pues a duras penas si se ha estado cumpliendo con el abasto de las que forman el cuadro básico de las principales instituciones médicas del país, pero en materia del coronavirus, que sería prácticamente, una emergencia, no se tendrían la cantidad ni la calidad para poder controlar la enfermedad.
Es, por lo tanto, preocupante que México, no se prepare para esta nueva calamidad de la salud, tanto en medicinas como en las previsiones necesarias, pues como bien se ha comentado, no parece existir interés en tomar las medidas adecuadas, pues al fin y al cabo, finalmente, quienes tendrán la culpa, serán los gobiernos del pasado, pretexto y solución que adopta el gobierno de la cuarta transformación.
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EL “CACHITO DE LA LOTERIA”.
AUNQUE YA VA siendo una practica constante violar las leyes mexicanas, comenzando por la propia Constitución General de la República, no deja de preocupar al pueblo mexicano, que ahora se pretenda realizar una rifa del avión presidencial, a través de la Lotería Nacional, la cual está impedida, por ley, para llevar a cabo estas prácticas de rifas y sobre todo, en especie.
Como bien se ha dicho, esta es una ocurrencia más que ha generado en el mundo ciertas reacciones de locura, pero como se ha dispuesto desde el ejecutivo federal, no hay manera de decir que no, salvo que algunos sectores de la población no lo acepten y decidan combatir esta decisión presidencial a través del amparo o de otras manifestaciones en contra.
Sin embargo, también en materia de amparo, se corre el riesgo de que no se admitan, luego de que la misma fuerza política del Estado, ha entrado hasta en el seno de la Suprema Corte de Justicia de la nación.
Como quiera que sea, con tan solo presentar públicamente, el famoso “cachito” de la lotería, como probable rifa del avión, ya se están violando las leyes, pero sobre todo, que se estaría cayendo, posiblemente, en algún acto ilegal, del cual pudieran salir muchos responsables, comenzando por el propio ejecutivo nacional, pues ya se están encontrando elementos que hablan, incluso, de un posible fraude con esta disposición.
Para empezar, como ya lo comentamos en entregas anteriores, nadie puede vender lo que no es suyo y el avión no es propiedad del Presidente de la República, muchos menos de Andrés Manuel López Obrador, sino del propio pueblo mexicano que ya lo ha pagado a través de sus impuestos y ahora se lo quieren vender de nuevo a través de la compra de un “cachito”, que elabora la Lotería Nacional.
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NADIE DUERME TRANQUILO.
HAY QUIENES ASEGURAN que la inseguridad ha sido permanente en todo el país y en Veracruz, ni se diga, pero que tiene por lo menos quince años que los índices de violencia se han incrementado permanentemente, de tal manera, que si antes de estos años, se dormía más o menos tranquilo, ahora ya es imposible para todos, incluyendo a los menores, quienes no debieran, a su corta edad, padecer estos insomnios.
Pues si, se revela que ahora todas las personas ya no duermen bien, un tanto por las preocupaciones normales de todos los seres humanos, que van desde los problemas de su propia economía, hasta los de su salud, pero estas condiciones se han agravado más por la presencia de la alta inseguridad que no se ha logrado resolver, la cual ya afecta a menores de edad que también se están preocupando seriamente por este fenómeno social, pues no los deja dormir tranquilamente.
Este es un problema que ya se presenta ante los médicos, quienes estudian cada caso y lo canalizan con especialistas para aminorar los efectos de estos padecimientos, pues consideran que poco a poco se va integrando ya como un asunto de salud pública.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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